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Ana Sofía de Dinamarca
Electora consorte de Sajonia
	22 de agosto de 1680-12 de septiembre de 1691
Predecesor	Magdalena Sibila de Brandeburgo-Bayreuth
Sucesor	Leonor Edmunda de Sajonia-Eisenach
Información personal
Nombre en danés	Anna Sophie af Danmark
Nombre en alemán	Anna Sophie von Dänemark
Nacimiento	1 de septiembre de 1647 ; Flensburgo, Ducado de Schleswig
Fallecimiento	1 de julio de 1717 (69 años); Castillo de Lichtenburg, Prettin, Electorado de Sajonia
Sepultura	Catedral de Freiberg
Nacionalidad	Alemana
Religión	Luteranismo
Familia
Familia	Casa de Oldemburgo
Padres	Federico III de Dinamarca; Sofía Amelia de Brunswick-Luneburgo
Cónyuge	Juan Jorge III de Sajonia (desde 1666)
Hijos	Juan Jorge IV de Sajonia; Augusto II de Polonia ;
Información profesional
Ocupación	Aristócrata
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Ana Sofía de Dinamarca (Flensburgo, 1 de septiembre de 1647-castillo de Lichtenburg, 1 de julio de 1717) fue la hija mayor del rey Federico III de Dinamarca y de Sofía Amelia de Brunswick-Luneburgo. Fue electora consorte de Sajonia desde 1680 hasta 1691 como la esposa de Juan Jorge III de Sajonia.

Ana Sofía era la hermana del rey Cristián V de Dinamarca, de la reina consorte de Suecia Ulrica Leonor de Dinamarca, y del príncipe consorte de Gran Bretaña, Jorge de Dinamarca, así como la madre del rey de Polonia Augusto II, "el Fuerte".

Primeros años y matrimonio

Ana Sofía nació en Flensburgo, la segunda hija del príncipe Federico de Dinamarca y de su esposa, Sofía Amelia de Brunswick-Luneburgo. El rey Cristián IV de Dinamarca, su abuelo paterno, murió cuando ella tenía seis meses de edad, y después de muchos meses de deliberaciones, el Consejo Real (Riksraad) eligió a su padre como rey. Fue coronado como Federico III de Dinamarca el 23 de noviembre de 1648. Sus padres tuvieron seis hijos más, dos de los cuales murieron en la infancia. Sus hermanos sobrevivientes eran: Federica Amalia, Guillermina Ernestina, Jorge y Ulrica Leonor. Ana Sofía recibió una buena educación; además de su danés natal, sabía alemán, latín, francés, español e italiano. Se la describe físicamente como de cejas gruesas y oscuras, y de nariz larga y curvada.

En 1663, se llevó a cabo en Copenhague, en la celebración en honor de sus quince años de edad, el compromiso de la princesa con Juan Jorge III, elector de Sajonia. Ana Sofía y Juan Jorge se casaron tres años después, el 9 de octubre de 1666. El rey polaco Juan III Sobieski, dijo después de su marido, "[Él] es un hombre honrado con un corazón recto."

Tuvieron dos hijos: Juan Jorge IV (Dresde, 18 de octubre de 1668-ib., 28 de mayo de 1694), que sucedió a su padre como elector; y Federico Augusto (Dresde, 22 de mayo de 1670-Varsovia, 1 de febrero de 1733), que sucedió a su hermano como elector y luego se convirtió en rey de Polonia.

Su marido también tuvo un hijo ilegítimo con su amante oficial, la cantante de ópera veneciana, Margarita Salicola, y pudo haber tenido una hija, Magdalena Sibylla de Neidschutz, con Úrsula Margarita de Haugwitz.

Sus dos hijos fueron llevados inicialmente a Dinamarca por damas de honor enviadas a Dresde por su madre, la reina Sofía Amelia.

El padre de Ana Sofía murió el 9 de febrero de 1670 y fue sucedido por su hermano mayor, Cristián V de Dinamarca, con quien ella mantuvo una correspondencia muy activa y examinó las cuestiones políticas. Visitó Dinamarca ese año y expresó su solidaridad con la encarcelada Leonora Cristina Ulfeldt, su prima hermana.

Su hermana, Federica Amalia, se había convertido en la duquesa de Holstein-Gottorp en 1667. En 1702, su cuñada Ana ascendió al trono de Inglaterra, Irlanda y Escocia, como la reina Ana de Gran Bretaña, y el hermano de Ana Sofía, Jorge, se convirtió en su consorte. Ella se convirtió en la electora consorte de Sajonia en 1680, y su hermana Ulrica Leonor se convirtió en reina consorte de Suecia el mismo año.

Su hermana, Guillermina Ernestina, la electora viuda palatina, vino a vivir con Ana Sofía en Sajonia en 1685.

Electora viuda

Su marido murió en 1692 en Tubinga de una enfermedad epidémica, probablemente cólera o la peste bubónica, y fue enterrado en la catedral de Freiberg, en Freiberg, Sajonia. Al año siguiente, Ana Sofía trató de poner fin a la historia de amor entre su hijo mayor, entonces elector Juan Jorge IV, y su amante, Magdalena Sibyla «Billa» de Neidschutz, con quien había estado viviendo abiertamente desde la muerte de su padre. Su difunto marido había tratado de romper la pareja, tal vez motivado por el temor que existía de una relación estrecha de sangre entre los amantes, pues «Billa» pudo haber sido su propia hija con Úrsula Margarita de Haugwitz, y por lo tanto hermanastra de Juan Jorge IV. Juan Jorge era ignorante de la posibilidad de que él y «Billa» estuvieran cometiendo incesto, e hizo caso omiso del reclamo como un rumor malicioso.

Ana Sofía obligó a su hijo a casarse con Eleonora Edmunda de Sajonia-Eisenach, una mujer de la nobleza alemana, pero el matrimonio resultó un fracaso. Juan Jorge IV no sólo abandonó a su novia, dejándola en el Höfe (la residencia oficial del príncipe elector) para estar con su amante en otro palacio, sino que trató de asesinarla para poder casarse con «Billa».

La nuera de Ana Sofía no pudo producir un heredero; sufrió dos abortos involuntarios, en agosto de 1692 y en febrero de 1693. En junio de 1693, la amante de su hijo dio a luz a una hija, María Guillermina Federica. Menos de un año después, «Billa» contrajo la viruela y murió el 4 de abril de 1694, en los brazos del elector. Juan Jorge IV murió 23 días después de la misma enfermedad, y fue enterrado en la catedral de Freiberg. Habiendo muerto sin descendencia legítima, fue sucedido por su hermano, quien se hizo cargo de la tutela de la huérfana Federica. Se crio en la corte real y fue reconocida como la sobrina de Federico Augusto.

Ana Sofía crio a su nieto, Federico Augusto, nacido el 17 de octubre de 1696, el único hijo de su segundo hijo y de su distanciada y auto-exiliada esposa, Cristiana Eberardina de Brandeburgo-Bayreuth. El niño sucedería a su padre como Augusto III de Polonia. Ana Sofía y su nuera se llevaban bien, ambas mujeres estaban de acuerdo, especialmente en materia de religión, y Eberardina visitaba a su hijo a menudo.

En sus últimos años, Ana Sofía vivía con su hermana, Guillermina Ernestina, en el castillo de Lichtenburg. Murió en Prettin.