A eleição presidencial na Argentina em 2007 foi realizada em 28 de outubro de 2007, em uma disputa entre a primeira-dama Cristina Kirchner, a deputada Elisa Carrió e o ex-ministro Roberto Lavagna. Cristina elegeu-se para o cargo de presidente, obtendo mais de 40% dos votos válidos (44,92%), e apresentando uma diferença de mais de 10% em relação a segunda colocada (que obteve 22,95% dos votos válidos). O grande número de votos garantiu a vitória da senadora ainda no primeiro turno, de acordo com o 98º artigo da constituição argentina. Também foram eleitos 24 senadores e 130 deputados para o congresso nacional nas eleições legislativas. Os candidatos eleitos assumiram seus cargos em 10 de dezembro de 2007.
Cristina Kirchner era esposa do então presidente Néstor Kirchner. Sua vitória garantiu a continuidade do governo da coligação governista Frente para a Vitória. O período ficou conhecido com Kirchnerismo.
Antecedentes
La Crisis de diciembre de 2001, que culminó en una masacre con decenas de muertos y el default de la deuda externa, había producido un descalabro generalizado, que puso a la Argentina en riesgo de disolución y guerra civil. La pobreza se elevó en 2002 al 56 %, la desocupación orilló el 30 %, niveles nunca alcanzados en la Argentina moderna, la clase media se redujo a la mitad y la marginalidad social se extendió. La política entró en una crisis profunda ("¡Que se vayan todos!"), poniendo fin al bipartidismo peronista-radical.
En esas condiciones se realizaron las elecciones presidenciales de 2003 que ganó uno de los tres candidatos peronistas, Néstor Kirchner, del recién creado Frente para la Victoria, luego de salir segundo en la primera vuelta, con apenas el 21 % de los votos, el más bajo obtenido por un presidente en la historia argentina. Así se inició lo que luego se conocería como kirchnerismo, identificado también con la letra «K».
En 2007 el gobierno kirchnerista ponía a prueba por primera vez la evaluación de la ciudadanía de su gestión de gobierno. El Frente para la Victoria, construido en torno al Partido Justicialista, había ampliado su composición con partidos provenientes de muy diversas ideologías (socialistas, comunistas, frepasistas, intransigentes, etc.) y sobre todo había incorporado a un amplio sector del radicalismo, conocido como Radicales K, liderados por el gobernador de la provincia de Mendoza, Julio Cobos.
Del lado de la oposición, la situación era la siguiente:
El bipartidismo peronista-radical había desaparecido y la Unión Cívica Radical (UCR) había quedado reducido a su mínima expresión histórica en las elecciones de 2003, con apenas un 2% de los votos, y por primera vez en su historia, ni siquiera lograba encontrar un candidato propio;