Entre los símbolos de Palestina se encuentran las banderas oficiales y no oficiales, así como los íconos y expresiones culturales emblemáticas, representativas o de algún otro modo características de Palestina y de su cultura.
Handala, personaje del dibujante Nayi al-Ali que, a través de un niño, representa a los refugiados palestinos. Suele aparecer de espaldas y con los brazos cruzados, a modo de rechazo a las actitudes de los líderes tanto internacionales como palestinos, y con ropas andrajosas que recuerdan la pobreza en la que viven muchos de los refugiados.[6][7]
La llave palestina simboliza el deseo de retorno a sus hogares de los palestinos que huyeron o fueron expulsados por las tropas israelíes, en un proceso conocido como la Nakba. La resolución 242 del Consejo de Seguridad de la ONU garantizaba a los refugiados palestinos el retorno a sus hogares, pero Israel no llegó a permitirlo nunca alegando motivos de seguridad.[8][9]
La Nakba fue el proceso de huida o expulsión masiva de la población palestina de sus tierras y hogares por parte de las tropas judías primero e israelíes después en 1948, coincidiendo con el proceso de construcción del Estado de Israel. Más de tres cuartas partes de la población palestina del momento, unas 750.000 personas, acabaron como refugiados en la Franja de Gaza, Cisjordania, Líbano, Siria y Jordania.
La sandía se ha convertido en un icono de la identidad palestina en los últimos tiempos debido, entre otros motivos, a la prohibición del uso de banderas palestinas en Israel, donde más de la quinta parte de la población es de origen palestino.[10]
Otro de los símbolos de la identidad palestina es la amapola nativa palestina. Aunque la flor nacional de Palestina es el iris haynei, adoptada en 2016, la amapola con pétalos rojos, estambres negros y tallo y hojas verdes evoca los colores primarios de la bandera panárabe y palestina.[11] Las naranjas de Jaffa,[11] los limones, los olivos[11] y el cactus (sabr)[12][11] también se utilizan ampliamente como símbolos de la nación palestina. Otras plantas, como el za'atar (tomillo) y el handal (coloquíntida),[13] y las artesanías tradicionales palestinas como el tatreez (bordado palestino) también se consideran símbolos nacionales.[10]
Galería
Explanada de las Mezquitas
Sandía
Kufiya palestina
Llave palestina
Amapola
Iris Haynei
Naranjas de Jaffa
Olivo
Cactus
Za'atar
Handal
Tatreez (bordado palestino)
Suimanga palestino
Referencias
↑The Palestinian People: A History - Page 392, Baruch Kimmerling - 2009
↑Cohen, Hillel (2017). «The Temple Mount/al-Aqsa in Zionist and Palestinian National Consciousness: A Comparative View». Israel Studies Review (Berghahn Books) 32 (1): 1, 8-9, 17. ISSN2159-0370. doi:10.3167/isr.2017.320102. «The holy site known to Jews as the Temple Mount and to Muslims as Haram al-Sharif or al-Aqsa is central to both the Jewish and Palestinian Arab national movements… Al-Aqsa can thus be seen as the central symbol of Palestinian nationalism... One should bear in mind that since the emergence of nationalism in the Arab world, important schools have insisted on separation of religion and state. In addition, a degree of tension exists between al-Aqsa’s two aspects, as a national symbol uniting Palestinian Muslims and Christians, and al-Aqsa as an exclusively Muslim symbol. In other words, the intentions of Palestinians united under the banner of al-Aqsa are not all the same… For the Palestinians, al-Aqsa is a singular focal point of self-respect and religious destiny. This heightens their commitment to the site, without connection to their religious affiliation (Muslim or Christian) or level of religious belief and observance. (El lugar sagrado conocido por los judíos como el Monte del Templo y por los musulmanes como Haram al-Sharif o al-Aqsa es central tanto para los movimientos nacionales judíos como para los árabes palestinos… Al-Aqsa puede ser vista, por lo tanto, como el símbolo central del nacionalismo palestino… Hay que tener en cuenta que desde el surgimiento del nacionalismo en el mundo árabe, importantes escuelas han insistido en la separación de la religión y el Estado. Además, existe un cierto grado de tensión entre los dos aspectos de al-Aqsa, como símbolo nacional que une a los musulmanes y cristianos palestinos, y al-Aqsa como símbolo exclusivamente musulmán. En otras palabras, las intenciones de los palestinos unidos bajo la bandera de al-Aqsa no son todas iguales… Para los palestinos, al-Aqsa es un punto focal singular de respeto propio y destino religioso. Esto aumenta su compromiso con el lugar, sin conexión con su afiliación religiosa (musulmana o cristiana) o nivel de creencia y observancia religiosa.)».
↑Reiter, Yitzhak (2013). «Narratives of Jerusalem and its Sacred Compound». Israel Studies (Indiana University Press) 18 (2): 115-132. ISSN1084-9513. doi:10.2979/israelstudies.18.2.115. «This article deals with the employment of religious symbols for national identities and national narratives by using the sacred compound in Jerusalem (The Temple Mount/al-Aqsa) as a case study. The narrative of The Holy Land involves three concentric circles, each encompassing the other, with each side having its own names for each circle. These are: Palestine/Eretz Israel (i.e., the Land of Israel); Jerusalem/al-Quds and finally The Temple Mount/al-Aqsa compound...Within the struggle over public awareness of Jerusalem's importance, one particular site is at the eye of the storm—the Temple Mount and its Western Wall—the Jewish Kotel—or, in Muslim terminology, the al-Aqsa compound (alternatively: al-Haram al-Sharif) including the al-Buraq Wall... "Al-Aqsa" for the Palestinian-Arab-Muslim side is not merely a mosque mentioned in the Quran within the context of the Prophet Muhammad's miraculous Night Journey to al-Aqsa which, according to tradition, concluded with his ascension to heaven (and prayer with all of the prophets and the Jewish and Christian religious figures who preceded him); rather, it also constitutes a unique symbol of identity, one around which various political objectives may be formulated, plans of action drawn up and masses mobilized for their realization (Este artículo trata sobre el uso de símbolos religiosos para las identidades y narrativas nacionales, utilizando como caso de estudio el recinto sagrado de Jerusalén (el Monte del Templo/al-Aqsa). La narrativa de Tierra Santa comprende tres círculos concéntricos, cada uno de los cuales engloba al otro, y cada lado tiene su propio nombre para cada círculo. Estos son: Palestina/Eretz Israel (es decir, la Tierra de Israel); Jerusalén/al-Quds y, por último, el complejo del Monte del Templo/al-Aqsa... En el marco de la lucha por la concienciación pública de la importancia de Jerusalén, un lugar en particular está en el ojo de la tormenta: el Monte del Templo y su Muro Occidental, el Kotel judío o, en la terminología musulmana, el complejo de al-Aqsa (alternativamente: al-Haram al-Sharif), incluido el Muro de al-Buraq... "Al-Aqsa" para el lado palestino-árabe-musulmán no es simplemente una mezquita mencionada en el Corán en el contexto del milagroso Viaje Nocturno del Profeta Mahoma a al-Aqsa que, según la tradición, concluyó con su ascensión al cielo (y la oración con todos los profetas y las figuras religiosas judías y cristianas que lo precedieron); más bien, constituye también un símbolo único de identidad, alrededor del cual se pueden formular diversos objetivos políticos, trazar planes de acción y movilizar masas para su realización)».
↑Alazzeh, Ala (2012). «Abu Ahmad and His Handalas». En LeVine, Mark; Shafir, Gershon, eds. Struggle and Survival in Palestine/Israel. University of California Press. pp. 427-444. ISBN978-0-520-26252-2. «…one of the most popular symbols of Palestinian nationalism. (…uno de los símbolos más populares del nacionalismo palestino.)».
↑Meital, Y.; Rayman, P. (2017). Recognition as Key for Reconciliation: Israel, Palestine, and Beyond. Social, Economic and Political Studies of the Middle East and Asia. Brill. ISBN978-90-04-35580-4. «Michal concedes the fact that Israelis do the same thing to the memory of the Nakba when saying "it was in 1948, enough talking about the past, let's talk about the future." When the Palestinians come with their keys [the Palestinian symbol of their lost homes], she says, "it's the same thing, it's a memory still burning in the hearts of families (Michal admite que los israelíes hacen lo mismo con el recuerdo de la Nakba cuando dicen: "Fue en 1948, basta de hablar del pasado, hablemos del futuro". Cuando los palestinos vienen con sus llaves [el símbolo palestino de sus hogares perdidos], dice, "es lo mismo, es un recuerdo que todavía arde en los corazones de las familias".)».
↑Fisk, Robert (28 de junio de 2018). «'I spoke to Palestinians who still hold the keys to homes they fled decades ago – many are still determined to return'». The Independent. «Keys must always be the symbol of the Palestinian “Nakba” – the “disaster” – the final, fateful, terrible last turning in the lock of those front doors as 750,000 Arab men, women and children fled or were thrown out of their homes in what was to become the state of Israel in 1947 and 1948. (Las llaves deben ser siempre el símbolo de la “Nakba” palestina – el “desastre” – el último, fatídico, terrible giro final en la cerradura de aquellas puertas principales mientras 750.000 hombres, mujeres y niños árabes huían o eran expulsados de sus hogares en lo que se convertiría en el estado de Israel en 1947 y 1948.)».