En la Prehistoria la sociedad se dividía en comunidades organizadas tribalmente. Sin embargo, en la Edad de los Metales aparecieron las primeras ciudades. Estas fueron los primeros protoestados.
En la Edad Antigua, ninguna entidad política cumplía los requisitos para ser considerado como estado. Sin embargo, no eran sociedades de jefatura, sino algo intermedio. Por ello, incluso algunos Imperios son considerados protoestados.
En La República de Platón se narra la estructura del estado ideal, pero fue Maquiavelo quien introdujo la palabra «Estado» usando el término del italianostato, evolución de la palabra status del latín:
Los Estados y soberanías que han tenido y tienen autoridad sobre los hombres, fueron y son, o repúblicas o principados.
Los protoestados no pueden ejercer la soberanía nacional completamente debido a la falta de instituciones y puede no estar reconocido por la comunidad internacional. En la actualidad, la mayoría de los protoestados han surgido por fallos en el Estado anterior (Estado fallido) o el intento fracasado de imponer un estado a una minoría étnica concentrada geográficamente. Suelen poseer pocas riquezas y estar en guerra permanente. Sus poblaciones suelen ser pequeñas.[4]