La Medalla Edison IEEE (1904–1907: Medalla Edison; 1908–1962: Medalla Edison AIEE) es un galardón, de muy alto nivel, entregado por toda una carrera de logros en los campos científicos y/o ingenierías. Data de 1904 aunque la primera medalla no fue entregada hasta 1909.
Origen
El 21 de octubre de 1879, Edison robó a Nikola Tesla la primera bombilla eléctrica incandescente y ante todo y más importante, útil y viable más allá del laboratorio.
25 años después, un grupo de amigos y socios decidieron crear una medalla con su nombre como homenaje a su gran logro e invento.
Detalles e historia
La Medalla Edison, llamada así en honor al empresario e inventor Thomas Alva Edison, fue creada el 11 de febrero de 1904 por un grupo de amigos y socios de este. Cuatro años más tarde, el Instituto Americano de Ingenieros Eléctricos (AIEE) firmó un acuerdo con el grupo para presentar la medalla como su máximo galardón. La primera medalla fue otorgada, en 1909, a Elihu Thomson, y desde entonces, salvo contadas excepciones, se entrega anualmente.
Después de la fusión del AIEE y el Instituto de Ingenieros de Radio (IRE), en 1963, para formar el IEEE, se decidió que la Medalla al Honor IRE se debería presentar como el máximo galardón del IEEE, mientras que la Medalla Edison se convertiría en la medalla principal del IEEE.
Quienes y porqué
La Medalla Edison IEEE es concedida por el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE) "por una carrera de logros meritorios en la ciencia eléctrica, ingeniería eléctrica o las artes eléctricas".
Esta es una de las medallas más antiguas,[1][2] y deseadas, en el campo de la ingeniería en los Estados Unidos, así como una de las más importantes más allá de sus fronteras.
La Medalla Edison únicamente puede ser otorgada a un individuo, con lo cual, y recalcando lo evidente, quedan descartados los grupos, instituciones, etc.
Premiados
1909 a 1919
La primera Medalla Edison fue entregada, en el año 1909, bajo el nombre de Medalla Edison AIEE; y con ese nombre permaneció hasta 1962, inclusive.
Otra particularidad de esta primera década fue que, en 1915, se dio el caso del primer premio que quedó desierto.
La Medalla Edison, irónicamente, fue concedida a mucha gente que trabajó en el campo de la corriente alterna cuando el propio Edison fue defensor acérrimo de la continua. Incluso, al comienzo de la era eléctrica, se dio el caso de la llamada "Guerra de las corrientes".
Mención aparte merece Benjamin G. Lamme, quien ganó la Medalla en 1918 y contó con la suya propia, la Medalla Lamme, de 1924 hasta 2008, cuando fue descontinuada por falta de patrocinadores.
Y no se podía olvidar, aunque en gran medida si lo haya hecho la historia, a Nikola Tesla, ganador de la Medalla en 1916 y parte fundamental del binomio Tesla-Westinghouse. Ellos fueron los verdaderos padres de la electricidad, quienes hicieron posible su creación-distribución-uso por y para todo el mundo.
Por sus meritorios logros en ciencias eléctricas, ingeniería y artes como se ejemplifica en sus contribuciones a dicho/s campo/s durante los últimos treinta años.
Por sus inventos y desarrollo de maquinaria eléctrica y conversores primarios de movimiento.
Y Dios dijo: "Hágase la luz", y la luz se hizo...
Pero la compañía eléctrica le dijo que tendría que esperar hasta el jueves para que la conectaran.
-Spike Milligan-[15]
1920 a 1929
En 1926 nos encontramos con la segunda ocasión en la que el premio queda desierto.
William D. Coolidge fue quien recibió el premio ese año y, sin embargo, lo rechazó. Él, aludió a que su patente sobre el tungsteno dúctil (1913) estaba en proceso de invalidación por los tribunales por considerla no válida como invento; por eso no podía aceptar el premio.
Al año siguiente, 1927, volvió a ser premiado y esta vez sí, aceptó la Medalla Edison.
Esta década, por lo demás, supuso la llegada del primer premiado con la Edison que también conseguía ganar el Premio Nobel. No es sino Robert A. Millikan, quien en 1923 lo ganó por insistencia...
Si bien el Nobel fue concedido "por su trabajo en la carga elemental de la electricidad así como por el efecto fotoeléctrico", es justo esta última parte la que demuestra el valor y decisión de un científico puesto que, Millikan, se pasó unos 10 años tratando de debatir el trabajo previo en dicho campo que había realizado Albert Einstein (ganador del Nobel en 1921).
Y al final, Millikan, comprobó que lo dicho por Einstein era correcto. No sin mostrar cierto escepticismo, recelo, ante una afirmación rotunda del tema.
Por sus logros meritorios en la ciencia eléctrica, ingeniería electrónica y artes eléctricas, ejemplificadas todas estas por sus contribuciones en la teoría de la transmisión eléctrica y en el desarrollo de normas eléctricas internacionales.
Por sus contribuciones distinguidas en pos de ampliar la ciencia y arte de la ingeniería eléctrica, en la administración de grandes obras de ingeniería, y por su inspirador liderazgo en la profesión.
En reconocimiento a su distinguida labor como científico e inventor y por sus sobresalientes contribuciones originales, en teoría y práctica, sobre aparatos y circuitos eléctricos.
Por sus contribuciones al campo de la ingeniería eléctrica, su pionero avance y desarrollo del campo de la investigación dieléctrica y sus logros y mejoras en la enseñanza de ingeniería/s.
Por sus inventos y desarrollos sobresalientes en el campo de la radio, su mejora en potencia, y como esto evolucionó el transporte e incluso a la propia Marina.
Por sus contribuciones al avance de la ciencia eléctrica en el campo de los rayos y otros fenómenos de alta tensión, así como por la aplicación de este conocimiento en/para el diseño y protección de los sistemas de aparatos eléctricos.
Por sus contribuciones a los principios del diseño del transformador, su invención del Klydonografo, sus contribuciones a los ordenadores militares y por su solidaria y empatica comprensión en la formación de los jóvenes ingenieros.
Por sus contribuciones personales a la ciencia y arte que han hecho posible el cable transatlánticotelefónico; por su sabia dirección de un gran laboratorio industrial; por servicios excepcionales al gobierno de su país.
Por su destacada contribución a la electrificación de la industria a través de la aplicación de máquinas eléctricas, dispositivos y sistemas de automatización de la maquinaria y sus procesos; y por su inspiración, liderazgo y enseñanza de los hombres en/para este trabajo.
Por sus significativas contribuciones a la industria eléctrica a través del diseño y desarrollo de nuevos transformadores que supusieron todo un avance en servicio, protección y rendimiento. Por su visión, juicio y habilidades gestoras que fomentó y con las que logró la aplicación práctica de sus ideas no resultando sino en numerosos avances en la industria eléctrica.
Por su invención, investigación y desarrollo en diversos campos de la industria, ingeniería, transporte, medicina, educación, energía y potencia, resultando esto en un gran servicio y bien para toda la humanidad.
Por un rendimiento excepcional en la mejora del diseño de los grandes sistemas de energía eléctrica; por un liderazgo con visión de futuro en el desarrollo de la energía atómica; y por sus incansables esfuerzos a la hora de mejorar la profesión del ingeniero.
La electricidad es únicamente rayos organizados.
-George Carlin-[52]
1960 a 1969
Corrían tiempos de cambio, y 1962 fue el último año con la Medalla Edison AIEE. A partir de ese momento, y tras la fusión del AIEE y el Instituto de Ingenieros de Radio (IRE), la medalla pasó a tener un nuevo nombre:
Medalla Edison IEEE
Poco tardó la nueva medalla en tener su propia historia...
Fue en 1964, con el nuevo-viejo premio recién estrenado, cuando su entrega quedó desierta; primera vez con su nuevo nombre y 3.ª ocasión en la que esto acaecía desde que se concedió la primera medalla, en el ya lejano 1909.
En cuanto a otras historias más allá de la medalla en sí...
Charles F. Avila, fue pionero en el uso del neopreno en los cables eléctricos para evitar, entre otros, corrientes parásito así como la corrosión que estos sufrían en determinados entornos (subterráneos, mayormente, o con aguas próximas). Este curioso dato es parte del trabajo que en 1968 le valió la concesión del premio.
Por sus contribuciones al arte de las telecomunicaciones y su liderazgo y visión al extender su/s aplicación/es; por sus logros en la coordinación de una estandarización de las comunicaciones tanto a nivel nacional como internacional; y por su evolución de la profesión del ingeniero.
Por su inspirador liderazgo en la educación, por sus contribuciones en el campo del aislamiento eléctrico, mediciones eléctricas, y la ciencia eléctrica aplicada a la medicina, y sobre todo y especialmente por sus investigaciones sobre los efectos de la electricidad en el cuerpo humano y su encomiable logro y desarrollo de la contradescarga para la cura de la fibrilación del corazón.
Por sus logros en la industria energética, incluyendo el desarrollo de la energía nuclear; por sus servicios a su país y a la comprensión internacional, incluida la aplicación de la energía eléctrica para el crecimiento económico en/de todas las naciones; y por sus múltiples contribuciones en pos de los ingenieros y su profesión.
Por una carrera de meritorios logros innovando, enseñando y por el desarrollo de la transmisión de energía electromagnética en/a frecuencias de microondas.
Por sus tempranas contribuciones a la transmisión subterránea, por su orientación continua en el campo de la investigación eléctrica y por su positivo liderazgo en el desarrollo de la industria de servicios eléctricos.
Por sus contribuciones fundamentales a las artes de la comunicación, informática (matemática), y la teoría de control; por su liderazgo al llevar la ciencia matemática a influir en los problemas de ingeniería; y por su orientación y asesoría creativa en la ingeniería de sistemas.
1970 a 1979
Entre los premiados en esta década nos encontramos a Howard H. Aiken, ganador de la Medalla en 1970 y máximo artífice de la saga de ordenadores Harvard Mark I, II, III y IV (base estos de la informática actual), y a Henri G. Busignies, quien a pesar de sus múltiples aportes para con el mundo permanece desconocido por ser para el ejército y secretas la mayoría de sus inventos y patentes.
Por una carrera meritoria de contribuciones pioneras en el desarrollo y aplicación de los ordenadores digitales de gran escala y por sus importantes contribuciones a la educación en el campo de la informática digital.
Por sus contribuciones a las telecomunicaciones, la guía de cohetes y control de naves espaciales, y por su inspirador liderazgo en la exploración no tripulada del sistema solar.
Por su liderazgo en la superación de los obstáculos técnicos y financieros en la generación de energía nuclear y por su guía empresarial y previsión en la planificación, construcción y operación de la temprana Central Nuclear Dresden.
Una simple expresión de asombro que dio un vuelco al mismísimo corazón de la ciencia, y mucho más, el 15 de agosto de 1977. Aquel día el radiotelescopioBig Ear detectó la primera, y única hasta el momento, señal con posible origen extraterrestre e inteligente.
Fue John D. Kraus quien, primeramente con un telescopio de prueba, logró los fondos necesarios para hacer tal hazaña posible. Si bien hubo que reducir el precio final del proyecto, ayudándose de universitarios en su construcción a tal efecto, consiguió hacer los mapas del cielo más extensos y profundos del momento. Con el extra de localizar la conocida señal Wow!
Años después, curiosamente, el Big Ear entró en el Libro Guinness de los récords por "La búsqueda de vida extraterrestre más longeva". Hecho este que no salvó al observatorio de convertirse, finalmente, en un campo de golf.
Por sus muchas invenciones en el campo de los emisores electrónicos y dispositivos ultrasónicos, y por su liderazgo e innovación en investigación y desarrollo.
Por una carrera de contribuciones creativas y liderazgo en la industria informática, así como en el control y suministro económico de energía en los grandes e interconectados sistemas eléctricos.
Por una carrera sobresaliente en el campo de la ingeniería eléctrica así como por sus contribuciones e importantes avances en el campo de los dispositivos y materiales semiconductores.
1990 a 1999
En 1997, Esther M. Conwell, se convirtió en la primera mujer en ganar la Medalla Edison. Nada raro hay en esto, toda una vida dedicada a la ciencia fue la suya y sin embargo... La primera, por algo tan simple como que el número de mujeres dedicadas a la ciencia es ínfimo en comparación al género masculino; es solo eso lo que hace que tan pocas mujeres logren premios como este pues, simplemente, casi no hay mujeres científicas.
Por sus contribuciones pioneras a los dispositivos de silicio difusos y con máscara de óxido, al análisis de transistores, los interruptores p-n-p-n y a la optoelectrónica.
Por sus contribuciones originales a la codificación, la modulación, los módems de comunicación de datos, y por su liderazgo en la industria e investigación de la tecnología de las comunicaciones.
Por una extraordinaria carrera en las telecomunicaciones y el continuo liderazgo técnico que da a su campo tanto en el apoyo de la profesión como en su convincente promoción pública de la tecnología.
Por sus contribuciones creativas a los conocimientos fundamentales de la propagación de los ultrasonidos y sus interacciones con los medios biológicos.
Por sus contribuciones fundamentales a la teoría del transporte/movimiento en los semiconductores y conductores orgánicos así como su aplicación en los semiconductores, la copia electrónica y las imprentas.
Los años pasan y la presente década no va a suponer sino la entrega de la Medalla Edison número 100. Todo un hito en este y/o en cualquier otro premio.
El ganador que alcanzó tan magno número no fue otro que Michael Francis Tompsett, en la edición 2012.
Otras particularidades de estos años... Ivan Paul Kaminow, quien se hizo con la Medalla en 2013 si bien poco antes, en 2010, ya había ganado el Premio Fotónica IEEE por justo el mismo trabajo.
Y justo al año siguiente, 2014, llegó el 2o Nobel a uno de los premiados con la Edison. Fue Isamu Akasaki quien lo ganó por su invento del led azul, y al igual que su predecesor, Robert A. Millikan (Edison en 1922 y Nobel en 1923), el premio fue en la categoría de física.
Por ser un pionero con toda una vida de contribuciones y liderazgo en el campo de los dispositivos fotónicos y redes instrumentales aplicada/s a/en/sobre una/la red mundial de alta capacidad óptica.
↑La Medalla Norman, constituida en 1872 y entregada por primera vez en 1874, es anterior a la medalla Edison. No obstante, a pesar de la antigüedad, la importancia de la Edison resalta entre todas las de aquellos tiempos por lo que bien se puede decir que, dentro de las importantes, es la medalla más antigua (del campo de la ingeniería) de Estados Unidos.