Juan Luis nació el 28 de diciembre de 1943, en la ciudad peruana de Lima. Hijo del médico oftalmólogo, Enrique Cipriani Vargas y de Isabel Thorne Larrabure; ambos supernumerarios del Opus Dei. Fue el cuarto de once hermanos, de los cuales tuvo como hermano al fallecido médico y catedrático Enrique Cipriani Thorne.[1]
Realizó su formación primaria en el Colegio Inmaculado Corazón (1948-1953), y la secundaria en el Colegio Santa María Marianistas y en el Colegio Sagrados Corazones Recoleta; todos los centros educativos en Lima.
En 1974, viajó a Europa, para estudiar en el Seminario Internacional del Opus Dei en Roma y en la Universidad de Navarra (España), donde obtuvo el doctorado en Teología.
Ámbito deportivo
Cipriani desarrolló desde muy joven una intensa actividad deportiva, como jugador de baloncesto. Fue campeón interescolar peruano en el equipo del colegio Santa María de Lima (1960), así también, titular del equipo Social Lince, de la categoría superior del baloncesto peruano (1960).
Fue integrante de la selección peruana que obtuvo el primer lugar en el campeonato bolivariano de Barranquilla (Colombia, 1961), integrante de la selección peruana que disputó el campeonato extraordinario Bolivariano en Cúcuta (Colombia, 1962).
En 1963, fue integrante de la selección peruana que realizó una tournée (gira) por Estados Unidos, con el técnico norteamericano McGregor, para perfeccionar el nivel deportivo del baloncesto peruano. Ese mismo año, fue integrante de la selección nacional subcampeona del Campeonato Sudamericano de Lima.
Luego, fue campeón universitario como integrante del equipo de la Universidad Nacional de Ingeniería (1965); en el equipo titular del club Social Lince, campeón de la categoría superior en 1965, 1966 y 1967. Fue integrante de la selección peruana que participó en los Juegos Panamericanos de Winnipeg (Canadá, 1967).
En 1969, fue integrante de la selección peruana que disputó el Campeonato Sudamericano en Montevideo, cuando Argentina, Brasil, Uruguay y Perú lograron el primer lugar en igualdad de condiciones. Además, fue entrenador del club Social Lince y de la selección de baloncesto en la segunda mitad de los años 1960.
Presidente de la Comisión Episcopal de Evangelización y Catequesis, en la Conferencia Episcopal Peruana (1988-1991).
El 31 de mayo de 1991, fue nombrado administrador apostólico de Ayacucho, y el 13 de mayo de 1995, nombrado arzobispo de la misma sede. Tomó posesión canónica durante una ceremonia en la Catedral de Ayacucho. El 29 de junio siguiente, en una ceremonia en la Basílica de San Pedro, recibió la imposición del palio arzobispal de manos del papa Juan Pablo II.
Ayudó a la recuperación de muchas iglesias ayacuchanas, reabrió el Seminario Mayor de Ayacucho y recuperó la celebración de la Misa todos los domingos en la Catedral.
Mediador en el caso de la residencia del embajador japonés
El presidente Alberto Fujimori, lo nombró mediador para buscar una resolución pacífica y la liberación de los rehenes,[2][3] en el caso de la toma de residencia la embajada de Japón en Lima, donde 14 emerretistas capturaron violentamente el 17 de diciembre de 1996 un gran número de rehenes, entre los que se encontraban el diplomático Francisco Tudela y Luis Giampietri. Luego de concretarse la Operación Chavín de Huántar, en conferencia de prensa, mostró su frustración porque no hubiera habido una solución pacífica.
No obstante, en los primeros días de enero de 1999, a pesar de enfatizar su «independencia y autonomía», expresó públicamente su amistad con el entonces presidente Alberto Fujimori.[6]
En 2018, presentó su renuncia como lo establece el Código de Derecho Canónico.[8] El 25 de enero de 2019, el papa Francisco aceptó su renuncia, como arzobispo de Lima, nombrado a su sucesor al mismo tiempo.[9] Ejerció de administrador apostólico sede vacante hasta el 2 de marzo, día de la posesión de su sucesor.[10]
El 27 de julio de 2016, fue confirmado como miembro de la Congregación para las Causas de los Santos in aliud quinquennium.[17] El 6 de septiembre del mismo año, fue confirmado como miembro de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos,[18] hasta el 2022. El 20 de diciembre siguiente, fue confirmado como miembro de la Pontificia Comisión para América Latina in aliud quinquennium.
A la muerte del papa Juan Pablo II el 2 de abril del 2005, Cipriani acude a Roma para participar en los funerales y posterior cónclave de elección del nuevo pontífice, en el cual habría tenido una participación relevante al ser uno de los supuestos papables, como representante de la Iglesia Católica latinoamericana y por el peso que la misma venía adquiriendo en la distribución universal del Catolicismo. Una vez finalizado el cónclave, retornó al Perú.
El cardenal Cipriani ha sido nombrado por el papa Benedicto XVI como miembro de la comisión encargada de revisar las conclusiones del reciente Sínodo de los obispos, que tuvo lugar en octubre de 2005 para tratar el tema de la Eucaristía, así como también se le encargó junto a dicha comisión la preparación del siguiente Sínodo, que tuvo lugar en 2008.
Posiciones políticas e ideológicas
Época de terrorismo
Su labor episcopal en Ayacucho, la desempeñó durante la época de terrorismo en el Perú, en la cual se convirtió en una voz intransigente a favor de la represión militar de la época. En 1991, afirmó que «la mayoría de las organizaciones de derechos humanos sólo están cubriendo las colas de los movimientos políticos, casi todos ellos marxistas y maoístas».[20] En octubre de 1992, tras la captura de Abimael Guzmán, líder de Sendero Luminoso, Cipriani abogó por su ejecución. En julio de 1993, después de que la Conferencia Episcopal Peruana calificara la pena de muerte como un «pecado grave», dijo: «No podemos permitir que el país no apoye la pena de muerte por el miedo, el miedo y la cobardía de unos pocos... . El mundo cambia día a día y no a favor de los cobardes. Estamos en una época de firmeza, claridad y hombría».[21] En 1995, respaldó una legislación para proteger a los militares y policías peruanos del procesamiento por actividades realizadas como parte de la represión de los movimientos radicales.[22]
Algunos sectores políticos le reprochan su comportamiento durante su gestión acusándole de negarle asistencia a las personas que fueron víctimas de la violencia, acusaciones que él siempre refutó.[cita requerida]
Homosexuales
En 1997, Cipriani era rector de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), cuando éste prohibió a una organización de estudiantes homosexuales, Colectivo Paréntesis, por realizar eventos. Tenía un folleto titulado Identidad sexual: ¿es posible elegir?, preparado y distribuido. Describió la homosexualidad como una enfermedad curable.[23][24]
Cipriani denunció periódicamente los esfuerzos por reconocer las relaciones entre personas del mismo sexo. En 2005, Cipriani comentó sobre la reciente legalización de las uniones entre personas del mismo sexo en España. Denunció la existencia de una campaña mundial y advirtió que al legalizar las uniones entre personas del mismo sexo se desfigura la sociedad. Dijo: "En el mundo de hoy, el mal se disfraza de bien, se impone a los demás y ¡ay de quien no lo acepte!". Pidió a los fieles que no se refieran a las relaciones que "no son entre un hombre y una mujer" como matrimonio. Dijo: "Llámalo como quieras, pero no vendas bienes estropeados, no trafiques en esa dictadura del relativismo moral en el que no hay nada bueno, sólo opiniones y tendencias de pensamiento".[25] En 2013, se opuso a la legislación para crear uniones civiles entre personas del mismo sexo en Perú. Lo calificó de "una vieja estrategia" que "empieza por poner el zapato en la puerta con esta ley, y acaba pidiendo el matrimonio entre homosexuales". Dijo que todos son libres de celebrar contratos entre sí, "pero no es necesario empezar a hacer una caricatura del matrimonio y luego destruirlo".[26]
Comunión en la mano
En abril de 2008, prohibió la práctica de recibir la Comunión en la mano, exigiendo en cambio que los fieles la recibieran en la lengua. Dijo que "la actitud relajada de muchos sacerdotes" es la culpable de la disminución del respeto a la Eucaristía entre los fieles.[27]
Aborto
En una discusión televisada sobre el aborto en el programa Diálogos de fe, explicó: "Las estadísticas nos dicen que las niñas abortan, pero no es porque estas niñas hayan sido violadas, sino porque, muchas veces, la mujer se pone en exhibición provocadora". La Arquidiócesis respondió a las críticas generalizadas a esa afirmación explicando que Cipriani estaba caracterizando la presentación inmodesta de las mujeres en la televisión.[28]
Controversias
Disputa sobre los estatutos de la PUCP
El religioso sostiene, basado en los pronunciamientos de la Santa Sede, que estos no se adecuan a la constitución apostólica Ex Corde Ecclesiae. Además, considera que un representante de la Iglesia Católica debería participar de una junta administradora perpetua que supervise el uso de los bienes dispuestos que la Universidad heredó de José de la Riva Agüero y Osma, tal como este lo dispuso en su testamento.[29] Las autoridades de la Universidad se oponen porque consideran que una dicha junta lesionaría el goce de la propiedad de la Pontificia Universidad Católica del Perú, al que debería ajustarse la disposición testamentaria. Hay quienes afirman que Cipriani pretendería ejercer una supervisión doctrinal ortodoxa de los contenidos enseñados en dicho centro de estudios,[30] el cual se ha caracterizado por su apertura a posturas heterodoxas que la Santa Sede ha observado, en su momento, a la luz doctrina de la Iglesia.[31] Esta etapa de conflicto entre la Pontificia Universidad Católica del Perú y el Arzobispado de Lima fue superado luego de la Reforma Estatutaria del 2016, cuando el mismo papa Francisco decidió resolver directamente el problema, lo que se tradujo en una reforma estatutaria que retiró al arzobispo de Lima como Gran Canciller (presidente honorario) de dicha casa de estudios, dicho cargo pasó a ser desempeñado por el Prefecto de la Congregación para la Educación Católica, el cardenal italiano Giuseppe Versaldi.[32]
Otras controversias
Juan Luis Cipriani suscitó controversia con sus declaraciones, dividiendo la opinión pública, según lo señalado por el medio de comunicación El Comercio:[33]
En 1994, en una entrevista para la revista Caretas criticó a la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH).[34][35] En dicha entrevista mencionó, ante la pregunta «¿Cuál es su aporte a Ayacucho?», que «Tenemos varios programas de ayuda social y espiritual... He salido al frente de los pobres y de los que han masacrado en esta ciudad. Y durante este trajín no he visto a los de la Coordinadora de Derechos Humanos, esa cojudez...».[35][36][37] En su editorial de 1999, Caretas señaló que «en el período reciente, [él] ha realizado acercamientos a organizaciones de derechos humanos, entidades que anteriormente había cuestionado».[38]
En 1996, el entonces arzobispo de Ayacucho apoyó la idea que «la noticia es un producto» y debe ser regulada por Indecopi o la Defensoría del Pueblo.[39] Políticos como Javier Diez Canseco expresaron rechazo por atentar la libertad de expresión.[40]
Cipriani mostró una postura en contra del apoyo de la Iglesia a la sociedad a base de la teología de la liberación, debido a que «esta nunca hará un análisis marxista de la lucha de clases».[41]
El entonces azorbispo promovió el evento religioso de manifestación conservadora denominado Marcha por la vida.[42]
Además de su postura, tuvo enfrentamiento con el jesuitaLuis Bambarén Gastelumendi, obispo emérito de Chimbote, cuando este era presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, quien llamó la atención a Cipriani porque cuando fue arzobispo de Ayacucho no atendió las denuncias relacionadas con violaciones a los derechos humanos.[43]
Sobre el Museo de la Memoria, Cipriani señaló que no reflejaba un espíritu de reconciliación, sino más bien el punto de vista de uno de los bandos, el 6 de marzo del 2009 declaró, en referencia a que no es pertinente abrir un espacio tan polémico cuando las heridas aún están abiertas, que "no es cristiano, ni ayuda a la reconciliación entre peruanos un Museo de la Memoria".[44]
En 2015 el diario El Comercio canceló su columna luego de acusaciones de plago de textos del papa Benedicto XVI, justificó la «falta de espacio» cuando intentó realizar citas.[45][46]
↑Preston, Julia (24 de abril de 1997). «At the Moment of Truth, Rebels' Resolve Failed». New York Times. Consultado el 26 de enero de 2019. «Las frecuentes visitas del arzobispo Juan Luis Cipriani de Ayacucho, miembro de la comisión que medió entre el Gobierno y los rebeldes, también sirvieron para inspirar optimismo en los momentos más sombríos, señalaron los rehenes.»
↑«Juan Luis Cipriani: "La mujer se pone, como en un escaparate, provocando"». La República. 30 de julio de 2016. Consultado el 26 de enero de 2019. «'Las estadísticas nos dicen que hay abortos de niñas, pero no es porque hayan abusado de las niñas, sino porque, muchas veces, la mujer se pone, como en un escaparate, provocando', declaró el arzobispo de la capital.»
↑«Puyas testamentales». Revista Ideele (181): 66. 2007. Consultado el 1 de julio de 2024. «La postura del arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani: El Arzobispado de Lima debe seguir administrando, junto con la PUCP, los bienes materia de la sucesión de Riva Agüero, pues el Arzobispado vela por el cumplimiento de los testamentos del sucesor».
↑«Cipriani sobre unión civil de homosexuales: “No creo que el pueblo la quiera”». El Comercio. 14 de septiembre de 2013. ISSN1605-3052. Consultado el 14 de octubre de 2023. «De otro lado, en su programa sabatino en RPP, Cipriani se refirió también a la Teología de la Liberación, corriente del catolicismo nacida en América Latina en la década de 1970. Al respecto, manifestó que el cristiano no puede estar tranquilo ante la injusticia y desigualdad, pero “lo que la iglesia nunca hará es un análisis marxista de la lucha de clases, de que hay que atacar a los ricos, hay que poner a los pobres”. [...] Al recordar al también filósofo y teólogo (Gustavo Gutiérrez), Cipriani afirmó que las obras de aquel –Teología de la Liberación y La fuerza histórica de los pobres- hicieron mucho daño».
↑«Marcha por la vida: Miles de creyentes contra el aborto». TVPerú. 23 de abril de 2019. Consultado el 18 de octubre de 2023. «"Somos 500 mil aquí reunidos (...) Un Perú que defiende la vida, que defiende el matrimonio entre un hombre y una mujer y que defiende la familia", aseguró el arzobispo de Lima y cardenal, Juan Luis Cipriani, promotor de este encuentro».