Las Institutiones del Corpus iuris civilis se basan principalmente en el anterior trabajo de Gayo, del siglo II, que tiene la misma disposición de las materias.[7] Incluso existen algunos pasajes idénticos. También usaron como fuente otro libro de Gayo, Res Cottidianae, además de pasajes de "instituta" de otros autores romanos como Florentino, Ulpiano, Marciano y Paulo.
Las precursoras Institutiones de Gayo fueron redescubiertas por el mundo moderno en 1816, mientras que las bizantinas del siglo VI fueron objeto de estudio —o, al menos, fueron conocidas— de manera casi ininterrumpida desde su publicación, que estuvo revestida del total patrocinio oficial por parte del emperador.
Por lo mismo, las Institutiones justinianas se volvieron parte indispensable de la enseñanza medieval del Derecho romano, sobre todo a partir de su uso en el siglo XI en la Universidad de Bolonia, como parte integrante del Corpus iuris civilis.
Debido a esto se terminó por costumbre llamando Instituta, en singular, a la cátedra universitaria de introducción a los primeros rudimentos del Derecho, basada en el estudio del mismo manual.
Hay que aclarar Instituta o Institutiones en tiempos clásicos, sobre todo en el mismo siglo II de Gayo, parece haberse referido a una materia o género de obras, más que a un texto en particular. Una costumbre que tiene precedentes a las Institutiones oratiorae de Quintiliano, del siglo I, que introducía al lector en la Retórica.[2]
Existió toda una serie de manuales de iniciación en el Derecho llamados con este nombre, entre ellos:[2]
Las Institutas de Justiniano, a imitación de las de Gayo se dividen de la siguiente manera:
Libro I: nociones generales sobre justicia, derecho y sobre gentes.
Libro II: sobre las cosas, maneras de adquirirlas, testamentos, legados y fideicomisos.
Libro III: herencias, abintestato y sucesiones universales, y de las obligaciones que surgen contratos o cuasi contrato.
Libro IV : obligaciones generadas en el delito, cuasidelito y las acciones en general.
Las Institutas tuvieron el doble carácter de manual y de ley, al ser promulgadas por el emperador.
Referencias
↑Vargas Valencia, Aurelia (2001). Las Instituciones de Justiniano en Nueva España. México, D. F.: Universidad Nacional Autónoma de México. p. 28, n. 38. ISBN968-36-8772-5. Consultado el 8 de abril de 2014. «Respecto a la alternancia de las voces con las que es denominada esta obra, Instituta o Institutiones, el término más apropiado es el segundo, aunque el primero se ha mantenido por costumbre en las universidades de tradición hispánica, como lo refiere Álvaro D'Ors (Derecho Privado Romano, pár. 66).»
↑ abcMoncayo Rodríguez, Socorro (enero de 2003-junio). «Gayo y su obra»(PDF). Letras jurídicas7. Archivado desde el original el 4 de noviembre de 2013. Consultado el 20 de septiembre de 2011.