Hipólita María Sforza (18 de abril de 1446-20 de agosto de 1484) fue miembro de la Casa Sforza, una poderosa familia italiana de condotieri que gobernó el ducado de Milán entre 1450 y 1535. Fue la primera esposa de Alfonso de Nápoles, duque de Calabria, que más tarde reinó como Alfonso II de Nápoles.[1]
Sus abuelos paternos fueron Muzio Sforza, renombrado condotiero, y Lucía de Torsano, y sus abuelos maternos fueron Filippo Maria Visconti, duque de Milán, y Agnese del Maino, hija del noble milanés Ambrogio del Maino.
Infancia y educación
Hipólita fue una mujer muy inteligente y culta. Tuvo como tutor al gramático y erudito griego neoplatónico Constantino Lascaris, que le enseñó filosofía y griego. Recibía las clases en una escuela de palacio junto con sus hermanos. Cuando tenía 14 años dio un discurso en latín ante el papa Pío II en la Dieta de Mantua, que se hizo célebre cuando circuló en forma de manuscrito.[2]
Escribió numerosas cartas, que se han publicado en Italia en un libro titulado «Las cartas de Hipólita María Sforza». También escribió poesía y una elegía dedicada a su padre.[2]
Matrimonio e hijos
Como estaba acordado desde diez años antes,[3] el 10 de octubre de 1465 Hipólita se casó en Milán con el duque de CalabriaAlfonso (1448-1495), hijo mayor de los reyes de NápolesFerrante I e Isabel de Clermont. Alfonso reinó brevemente en Nápoles como Alfonso II, pero Hipólita no llegó a ser coronada reina pues había muerto diez años antes. El matrimonio de Hipólita y Alfonso fue políticamente ventajoso, ya que creó una poderosa alianza entre el reino de Nápoles y el ducado de Milán, una de las ciudades-estado más importantes de Italia en el siglo XV. Hipólita fue la primera esposa de Alfonso.[4]
Pedro, príncipe de Rossano (1472-1491), lugarteniente general de Apulia, que murió a los 19 años.[5]
Hipólita Maria Sforza murió en Nápoles el 20 de agosto de 1484 a los 38 años. Su marido se casó en segundas nupcias con su amante, Truzia Gazzela, con quien ya tenía dos hijos ilegítimos.