La generación de 1936 (también, generación del 27, promoción de 1936 o primera generación de posguerra) es el nombre que se le ha dado al movimiento literario situado entre 1936 y 1941 constituido en España por los escritores, poetas y dramaturgos de la época de la guerra civil española.[1]
Características
Los escritores agrupados en esta generación fantasma, compartieron con diferente intensidad las consecuencias de la España de la autarquía y la división entre vencedores y vencidos, la censura y las penurias y miserias morales y materiales que imponía la situación, durante un periodo en el que en Occidente prevalecían las corrientes existencialistas.[2]
Se formaron en ambientes universitarios de la dictadura de Primo de Rivera y la II República. Las características principales son:[cita requerida]
Rehumanización del arte
Arte cercano a los conflictos sociales
Vuelta al realismo, existencialismo, regeneracionismo
Etiquetados como 'intelectuales arrojados a las cárceles'
Del poeta Miguel Hernández, muerto en el umbral del periodo y considerado por varios críticos como faro de esta generación, pueden citarse estos versos de su Elegía a Ramón Sijé que, de algún modo, resultan orientadores del espíritu que envolvió a sus componentes:
"No hay extensión más grande que mi herida, lloro mi desventura y sus conjuntos y siento más tu muerte que mi vida."
Ricardo Gullón dejó una lista de los autores que consideró vinculados a esta generación,[3] integrándose él mismo entre sus ensayistas. Los criterios generacionales que siguió no son rígidos y por tanto discutibles. Los parámetros manejados son la edad, la dedicación a la literatura en la fecha de partida (1936) —y señalada como definitoria de la generación—, la convivencia de muchos de ellos, la publicación en las mismas revistas, colecciones literarias, diarios y otras publicaciones, y la participación en las experiencias de la época desde similares círculos de acción.