En 1949 pudo regresar a la RDA, donde residió hasta su muerte en Märkisch Buchholz y Berlín. Ese mismo año ingresó en el Partido Nacional Democrático de Alemania (NDPD), al que perteneció hasta 1972, y hasta 1958 colaboró con el aparato del partido. Además fue miembro de la junta directiva de la Deutscher Schriftstellerverband desde 1952. A partir de 1958 y hasta su muerte se dedicó a escribir.
Además de su faceta literaria, Fühmann era una persona activa en el ámbito de la política. Ayudó a muchos autores jóvenes e intercedió por escritores que encontraban trabas o que sufrían represión por parte de las autoridades de la RDA. Fue uno de los primeros firmantes de la carta de protesta contra el destierro de Wolf Biermann en el año 1976.[2]
Falleció de cáncer en 1984. Por su expreso deseo fue enterrado en Märkisch Buchholz y no en Berlín.
Obra
Fue un autor polifacético; escribió poemas, adaptaciones libres, literatura infantil, ensayos, una vasta obra narrativa y realizó intentos literarios poco comunes. Por ejemplo, escribió un ballet (Kirke und Odysseus), publicó junto con el fotógrafo Dietmar Riemann un libro sobre personas con discapacidad intelectual (Was für eine Insel in was für einem Meer) en el que trabajó tres años, y un libro de poemas donde él únicamente escribió los títulos, elaborado a partir de reorganizar el diccionario de rimas de Wilhelm Steputat (Urworte. Deutsch).
Durante toda su vida tuvo el deseo de escribir literatura infantil y juvenil; publicó su primer libro para niños a petición de su hija. Después continuó con cuentos de hadas, piezas para títeres, libros y narraciones sobre leyendas clásicas. Mantuvo correspondencia con niños que le leían, y redactó algún libro por encargo.
Su obra narrativa es extensa. Sus primeros relatos poseen a menudo un carácter autobiográfico. En su volumen Das Judenauto trató sobre temas de su infancia y de su juventud. En otras narraciones analiza la época del nacionalsocialismo y su participación. El término «cambio» era para él, que se había convertido en un socialista convencido después de un pasado nacionalsocialista, sumamente importante. De hecho, es uno de los temas principales de una de sus obras más importantes, Zweiundzwanzig Tage oder Die Hälfte des Lebens; en ella Fühmann reflexiona, en forma de diario de un viaje a Hungría, sobre diferentes temas e intercala pequeños relatos.
Otra parte esencial del contenido de la obra de Fühmann son los cuentos de hadas, las leyendas y los mitos. Sus ensayos contribuyeron a la publicación de autores inéditos en la RDA, como Georg Trakl o Sigmund Freud.
A partir de Zweiundzwanzig Tagen empezó a mostrarse crítico con la sociedad de la RDA. Intentó mediante cartas a políticos (más adelante lo hizo públicamente) convencerles para que aplicaran cambios en sus políticas, sobre todo en las políticas culturales. Esta situación se vio reflejada en su obra, sobre todo en Saiäns-fiktschen. Abandonó las asociaciones político-culturales de la RDA, como la Schriftstellerverband der DDR o la Academia de las Artes de Berlín. En su último año de vida empezó a desesperarse por las condiciones políticas de la RDA, como se puede ver en la correspondencia que mantenía con Christa Wolf (Monsieur – wir finden uns wieder).[2] No pudo finalizar lo que él consideraba su obra principal, aparecida tras su muerte con el título Im Berg en el año 1991, y que mantuvo el subtítulo que Fühmann quería: Fragment eines Scheiterns (fragmento de un fracaso).
En su testamento, que se dio a conocer un año después de su muerte, dejó dicho:
Ich habe grausame Schmerzen. Der bitterste ist der, gescheitert zu sein: In der Literatur und in der Hoffnung auf eine Gesellschaft, wie wir sie alle einmal erträumten.
Tengo dolores terribles. El más amargo, ser un fracasado en la literatura y en la esperanza en una sociedad como la que todos una vez soñamos.