Dore Hoyer (Dresde, 12 de diciembre de 1911-Berlín, 31 de diciembre de 1967) fue una bailarina y coreógrafa[1] alemana.
Se la considera "una de las bailarinas solistas más importantes de la tradición Ausdruckstanz".[2] Inspirada por Mary Wigman, desarrolló sus propios programas en solitario y realizó numerosas giras antes y después de la Segunda Guerra Mundial. Wigman llamó a Hoyer "la última gran bailarina moderna de Europa".[3]
Biografía
Dore Hoyer nació en Dresde, en el seno de una familia obrera, el 12 de diciembre de 1911. De joven aprendió rítmica y gimnasia.[2]
En 1931, fue contratada como solista en Plauen, y en 1933 se convirtió en maestra de ballet en Oldenburg.[4]
En 1960, en el Teatro Argentino de La Plata, formó un grupo de cámara y un coro de movimiento integrados como el Grupo Dore Hoyer . Allí creó las obras “Cadena de fugas” y “La Idea”.
Se le otorgó el Premio de la Crítica Alemana en 1951.
Hoyer actuó por última vez el 18 de diciembre de 1967 en el Theater des Westens de Berlín.[5] Ella corrió con todos los gastos de la actuación, que contó con escasa asistencia.[6] Endeudada y ante la posibilidad de que no pudiera seguir bailando debido a una lesión de rodilla,[2] se suicidó en Berlín el 31 de diciembre de 1967.[1] En una de las últimas cartas que escribió antes de morir, se lamentaba: "Sólo en la danza podía comunicarme".[7] Una calle de Dresde lleva su nombre.
Tras su muerte, los papeles y archivos de Hoyer quedaron en manos de Waltraud Luley, albacea de su herencia, que los donó al Deutsches Tanzarchiv Köln.[8][9]
Garnet Schuldt-Hiddemann: Ganz oder gar nicht - Dore Hoyer.Tanzen und tanzen und nichts als tanzen. Tänzerinnen der Moderne von Josephine Baker bis Mary Wigman. Aviva, Berlín 2004. ISBN 3-932338-22-7