Un avión cisterna (también llamado avión nodriza)[1] es un avión usado para reabastecer en vuelo a otras aeronaves.
Normalmente son utilizados por las fuerzas aéreas para reabastecer a aeronaves más pequeñas y de menor radio de acción.
Los aviones cisterna transfieren el carburante por una lanza periscópica o con mangeras flexibles. Con el sistema de lanza, el sistema se conecta físicamente al avión receptor y se bombea el carburante desde el avión cisterna. El sistema hose implica que el avión a recargar intercepte la manguera y maniobre hasta ponerla en su receptáculo: una vez conectada el piloto del avión receptor debe utilizar una bomba para aspirar el combustible. Los aviones cisterna suelen tener ambos sistemas.
Diseño
Los aviones cisterna son aviones de transporte especialmente adaptados para la misión de reabastecimiento aéreo de combustible a otros aviones de combate; transportan tanques de combustible en su interior y también pueden enviar combustible desde sus propios tanques internos de combustible bajo la aeronave y las alas, a otros aviones de combate ligeros mediante un sistema de manguera y canasta flexible, incluso desde un tanque de combustible externo bajo el fuselaje central.
El reabastecimiento en vuelo es una operación compleja pero otorga como ventaja táctica importante el incremento del radio de acción. Por este motivo, los aviones cisterna son militarmente importantes ya que incrementan la efectividad de combate de otras aeronaves. La USAF usa el KC-135 Stratotanker y KC-10 Extender. La fuerza aérea de los marines estadounidenses opta por el KC-130 Hércules. La Armada de los Estados Unidos utiliza una versión modificada del avión para guerra submarina S-3 Viking, aunque ya planea sustituirlo por el F/A-18 E/F Super Hornet. Tanto el Viking como el Super Hornet llevan un depósito eyectable, de tal forma que una vez que han reabastecido a otros aviones pueden soltar el depósito y actuar como aviones de combate.