Luego ejerció la medicina en Venecia donde paralelamente efectuó estudios de anatomía y de física experimental, dándole notoriedad en Europa.
En 1782, obtiene la cátedra de "ad Practicam Medicinae" en la Universidad de Padua y, en 1787, en la de "ad Practicam Medicinae in Nosocomio" que ocupó hasta su deceso.
Dotado de una sólida preparación físico-matemática, fue un investigador acudo y original en los campos anátomo-fisiológico y botánico-zoológico.
Muchas de sus contribucines científicas eran de interés biofísico y le otorgó el aprecio de numerosos de los científicos contemporáneos como Spallanzani, Volta, Bonnet, Cuvier.
Su prestigio en el ambiente científico fue alto, tuvo correspondencia con científicos de prestigio y fue miembro de las academias científicas más elevadas.
Algunas publicaciones
Occursus medici de vaga aegritudine infirmitatis nervorum, Venecia, 1780