Veritas, como nombre común, es el que recibe la virtud romana de la veracidad (o sinceridad), una de las principales que un buen romano debía poseer. En la mitología griega, la diosa de la verdad era conocida como Alétheia.
Iconografía
Su iconografía la representa como una joven virgen, desnuda o vestida de blanco, a menudo asociada a objetos como el espejo (que significa que no debemos rehuir mirarnos en él y conocernos a nosotros mismos -nosce te ipsum-) o en relación con el citado pozo.[1]
En el contexto de los debates sobre la separación Iglesia-Estado y el affaire Dreyfus, a finales del siglo XIX en la Tercera República francesa, se utilizó la iconografía de la Vérité ("verdad" en lengua francesa, término que tiene una equívoca relación con la expresión Chaire de vérité -"silla" o "cátedra de la verdad"-, que se emplea para el concepto de "púlpito").
Los Public Affairs Officers de las Fuerzas Canadienses llevan insignias blasonadas con la palabra "Veritas" como parte de su uniforme estándar.
La palabra se usa también en la frase In vino veritas ("en el vino, la verdad"), que indica que la embriaguez causa una desinhibición en la que se tiende a decir lo que realmente se piensa. A veces el tópico se extiende a la sinceridad o ingenuidad de la deficiencia mental y de la infancia (los borrachos, los tontos y los niños dicen siempre la verdad).