Trauma raquimedular

Columna vertebral y sus regiones.

El trauma raquimedular (raquis, que procede del griego ῥάχις y denota columna vertebral y médula, que procede del latín medulla y denota la sustancia grasa que se halla dentro de algunos huesos de animales) consiste en el daño a la médula espinal que puede abarcar simultáneamente las meninges, los vasos sanguíneos y el tejido nervioso; es una lesión ocasionada a la médula espinal a través de la columna vertebral, en donde las vértebras cervicales tienen mayor probabilidad de compromiso de lesión. Dicho traumatismo puede tener muchas causas, entre las cuales se encuentran: accidentes automovilísticos, caídas, heridas de bala, etcétera.[1]​ Se conocen cuatro mecanismos principales de este traumatismo: extensión, flexión, rotación y compresión vertical o axial; estos son movimientos tolerados por la columna vertebral siempre y cuando se mantengan dentro de ciertos límites de tolerancia.[2]

Este traumatismoo, al igual que uno de tipo craneoencefálico, presenta dos lesiones: la primera causada al momento del evento y la segunda que implica cambios fisiopatológicos que implican un aumento en la destrucción neuronal.

La identificación de la lesión está dada por signos motores, sensitivos y superficiales; y en algunos casos, por el dolor. En otras situaciones, pero menos comunes, el afectado jamás presenta signos que evidencien la lesión raquimedular; es así, como ella se revela al personal médico por medio de radiologías: rayos X o tomografía axial computarizada (TAC).

Véase también

Referencias

  1. Traumatismo Raquimedular. Archivado el 17 de octubre de 2007 en Wayback Machine. Consultado el 24 de octubre de 2007.
  2. Trauma Raquimedular. Consultado el 24 de octubre de 2007