La transcripción de Almira es considerada por los crÃticos como uno de los arreglos musicales tardÃos más sorprendentes de Liszt, asà como su única adaptación de una pieza barroca de su último perÃodo.
En su transcripción barroca más reciente, anterior a Almira, la de la FantasÃa y fuga en sol menor de Bach, BWV 542 que data de 1867, Liszt sigue el original para órgano casi exactamente. Con Almira, Liszt se desvÃa considerablemente. [1] Si bien conserva el contorno original de las melodÃas de Händel, cambia el orden de las danzas (en la ópera, a la chacona le sigue la zarabanda), luego agrega material musical introductorio, de transición y de desarrollo junto con su propio tratamiento variado de las danzas mismas. [3]
El resultado del planteamiento de Liszt es un doble conjunto de variaciones altamente unificado (un conjunto de variaciones de la zarabanda seguida de un conjunto separado de variaciones de la chacona), que casi se convierte en una obra independiente en el proceso. (Humphrey Searle, de hecho, catalogó la obra como una composición independiente). La zarabanda domina la pieza, funcionando de manera muy similar a una chacona de Bach como las variaciones de una progresión armónica, mientras que la chacona en sà es más rÃtmica. [2] Algunos dicen que esta obra anticipa las tanscripciones románticas tardÃas de Bach de Ferruccio Busoni en su grandeza general, [1] especialmente en la importante transformación clave de la zarabanda al final de la obra. [2]
BibliografÃa
Baker, James M., ed. Kenneth Hamilton, "Un estudio de las últimas obras para piano", The Cambridge Companion to Liszt (Cambridge y Nueva York: Cambridge University Press, 2005). (libro de bolsillo).
Hinson, Maurice, La guÃa del pianista sobre transcripciones, arreglos y paráfrasis (Indiana University Press). [1]
Howard, Leslie, Notas para Hyperion CDA66371/2, Liszt en la Ópera I, Leslie Howard, piano.