”Proclive al Grand Guignol… infinito número de situaciones vulnerables. La labor de Pierre Chenal es válida únicamente en el aspecto exterior del relato.”[1]
Manrupe y Portela escriben:
”Con sus perfecciones y arbitrariedades, buen ejercicio de cine negro. Una historia con muchas vueltas de tuerca, odios y traiciones de todo tipo y la excelente actuación de Inda Ledesma (una auténtica harpía) hacen que este film pueda disfrutarse con cierto cinismo.”[1]
Referencias
↑ abcdManrupe, Raúl; Portela, María Alejandra (2001). Un diccionario de films argentinos (1930-1995). Buenos Aires: Editorial Corregidor. pp. 524-5. ISBN950-05-0896-6.