”Vale como un capítulo adicional a aquel teleteatro tanto en lo que hace al asunto como en su dramatización.”[1]
Manrupe y Portela escriben:
”A partir del gran éxito de la telenovela homónima de Canal 13, la película con un happy end que el original no tenía. Correcta dentro de lo rutinario. Algunos años más tarde Migré diría que se filmó sin su aprobación.”[1]