La Press Complaints Commission (Comisión de Quejas de la Prensa o PCC, en inglés) es una organización británica de autorregulación para periódicos y revistas impresas, de participación voluntaria, compuesta por representantes indicados por los principales grupos de medios de comunicación. La PCC financia sus actividades a través de una cuota anual que cobra a los periódicos y revistas. No tiene un mandato legal, los periódicos y revistas se adhieren libremente a sus normas, y la industria gráfica se autorregula.[1]
En diciembre de 2011, el presidente de la Comisión, Lord Hunt, anunció sus planes de reemplazar la PCC con un nuevo órgano regulador independiente.[3]