El palacio de Villena o palacio del marqués de Villena es un edificio renacentista de la primera mitad del siglo XV, situado en el municipio de Cadalso de los Vidrios, en el extremo suroccidental de la Comunidad de Madrid (España). Posee una zona ajardinada, trazada en el siglo XVI, que ha recibido la declaración de Bien de Interés Cultural, en la categoría de Jardín Histórico. Todo el conjunto es de titularidad privada.
Parece ser que en sus dependencias se alojó Isabel la Católica, tras la Jura de los Toros de Guisando, mediante la cual se puso fin a la guerra civil que enfrentaba a los nobles castellanos partidarios de ésta con los que apoyaban a su sobrina, Juana la Beltraneja.
En 1917 sufrió un incendio, que destruyó la biblioteca y el mobiliario interior. Fue reconstruido a iniciativa privada.
Descripción
El edificio
El Palacio de Villena es de planta rectangular y está construido con sillares de granito, de grandes dimensiones. Presenta un aspecto fortificado, fruto de las tendencias románicas militares que inspiraron su diseño original. Estas están presentes en el antepecho sobre matacanes, en las almenas de la fachada norte, en las garitas y en las troneras de orbe dispuestas sobre el citado antepecho, elementos, todos ellos, instalados con fines ornamentales.
La fachada sur, que integra una arquería de medio punto, se hace eco de las corrientes renacentistas de la época, incorporadas en las sucesivas reformas de las que fue objeto el edificio. También corresponden a este estilo las columnas jónicas, zapatas y dinteles de la galería interior, el mirador, los guardapolvos platerescos y los blasones que decoran el exterior.
Los jardines
En el siglo XVI fue levantada una zona ajardinada de estilo español, colindante al edificio. Los jardines se articulan alrededor de un gran estanque de piedra, restaurado en los años ochenta del siglo XX. Presentan un trazado hipodámico e integran elementos decorativos como columnas y doseles de granito.