La película fue galardonada en el VII Festival Internacional de Panamá de 1969 con el Premio Esfinge al mejor trabajo de investigación en tanto Perla Caron recibió el premio a la mejor interpretación femenina.[1]
”…pocos grisados y muchos destellos de imaginación. Perla Caron otorga una singular y atractiva dimensión al personaje. La publicidad, un mundo que conoce detalladamente, es la excusa que utiliza Paternostro en su primer largometraje para señalar el aturdimiento y la confusión de ciertos ambientes porteños”
”Interesante aporte…desde el punto de vista visual tiene grandes aciertos, y la fotografía muestra, insinúa al espectador la mecanización artificial de la vida moderna, más allá del nuevo ámbito de la publicidad. Puede objetarse cierta debilidad del libreto.”
Manrupe y Portela escriben:
”El mundo de la publicidad por primera vez contado desde la publicidad. Con sus técnicas y clisés y cierta insustanciabilidad en el relato. Un buen referente de época con bastantes aciertos.”
Referencias
↑Jorge Abel Martín: Diccionario de realizadores contemporáneos pág. 153, Instituto Nacional de Cinematografía, Buenos Aires, 1987 isbn 950-99113-1-3
Bibliografía
Manrupe, Raúl y Portela, María Alejandra (2001). Un diccionario de films argentinos (1930-1995) (pág. 384). Buenos Aires: Editorial Corregidor. ISBN950-05-0896-6.