Puccini escribió cinco versiones de la ópera. La versión original de la ópera,[4] en dos actos, fue estrenada el 17 de febrero de 1904 en La Scala de Milán. Obtuvo muy mala recepción del público y la crítica, a pesar de la presencia de destacados cantantes como la soprano Rosina Storchio, el tenor Giovani Zenatello y el barítono Giuseppe De Luca en los papeles principales. Esto se debió en gran medida a que se acabó tardíamente y al tiempo de ensayo inadecuado. Puccini retiró la ópera y la reescribió notablemente, dividiendo el segundo acto en dos y haciendo otros cambios. La segunda versión revisada que conquistó a la audiencia se estrenó en Brescia el 28 de mayo de 1904.[5] Fue esta segunda versión la que se estrenó en los Estados Unidos en 1906, primero en inglés el 15 de octubre de 1906 en el Teatro Columbia de Washington D. C., y después el 12 de noviembre del mismo año en el Teatro Garden de Nueva York,[6] por la Compañía de Ópera Inglesa de Henry Savage (así llamada porque interpretaba en traducciones al inglés).
Se estrenó en Argentina el 2 de julio de 1904 en el Teatro de la Ópera, Buenos Aires. En 1908 se estrenó en el nuevo Teatro Colón, representándose durante 29 temporadas. En Londres, su primera representación en el Reino Unido se produjo el 10 de julio de 1905 en la Royal Opera House, Covent Garden.
En 1906, Puccini escribió una tercera versión,[7] que se interpretó en la Metropolitan Opera de Nueva York. El estreno en el Met el 11 de febrero de 1907 contó con la presencia de Puccini y cantaron Geraldine Farrar y Enrico Caruso. En el Met se ha representado 818 veces entre 1907 y 2009, siendo la sexta ópera más popular del repertorio. En 1907, Puccini hizo varios cambios en la partitura orquestal y vocal, y esta se convirtió en la cuarta versión,[8] que se representó en París.
Finalmente en 1907, Puccini hizo su revisión final de la ópera en una quinta versión,[9] que se conoce ya como la "versión estándar". Hoy, la versión estándar es la que se interpreta más a menudo en el mundo. Sin embargo, la versión original de 1904 también se representa ocasionalmente.
Madama Butterfly se estrenó en España en el Teatro del Bosc de Barcelona en agosto de 1907. En noviembre de ese año llegó al Teatro Real de Madrid, donde se representó 72 veces desde entonces hasta julio de 2007, cuando fue dirigida por Plácido Domingo. En el Teatro del Liceo se estrenó en 1909 y se representó 152 veces hasta 2007. En el Teatro de la Zarzuela se representó 18 veces entre 1965 y 1991. En 1968, fue protagonizada por Montserrat Caballé, Norma Lerer, Bernabé Martí y Manuel Ausensi.
La primera representación australiana se presentó en el Theatre Royal de Sídney el 26 de marzo de 1910, protagonizada por Amy Castles.
Entre 1915 y 1920, la cantante de ópera más conocida de Japón, Tamaki Miura, obtuvo fama internacional por sus representaciones como Cio-Cio San. Su estatua, junto con la de Puccini, puede encontrarse en el Jardín Glover en Nagasaki, la ciudad donde se ambienta la ópera.
Debido a las connotaciones negativas del personaje del teniente estadounidense Pinkerton, la ópera fue suspendida en Estados Unidos durante los años de la Segunda Guerra Mundial en el enfrentamiento bélico entre Japón y los Estados Unidos.
Butterfly es un hito en el repertorio operístico para compañías de todo el mundo y aparece como la 8.ª en la lista Operabase de las óperas más representadas por todo el mundo.[10] la cuarta de Italia y la tercera de Puccini, después de La bohème y Tosca. Ha sido dirigida en los escenarios incluso por directores de cine, como por ejemplo, Ken Russell, Harold Prince y Anthony Minghella, autor de una controvertida puesta en escena en Londres y Nueva York.
En 1904, Benjamin Franklin Pinkerton, un oficial de la Armada estadounidense a bordo del USS Abraham Lincoln, toma una casa sobre una colina en Nagasaki, Japón, para sí y su prometida, la quinceañera Cio-Cio-San,[nota 1] apodada Butterfly.[nota 2] Por intermedio del casamentero Goro, el marino ha arreglado su matrimonio con la muchacha. La joven ve ese vínculo como un compromiso de por vida, pero para Pinkerton solo se trata de una aventura fuera de su país. Como las leyes de divorcio japonesas son muy laxas, su secreta intención es divorciarse de la joven nipona una vez que encuentre la esposa estadounidense adecuada. La boda tendrá lugar en la casa y Butterfly está tan animada por casarse con un estadounidense que antes se convierte secretamente del budismo al cristianismo. Su tío Bonzo, un monje budista, descubre la conversión, va a la casa, maldice a la joven y ordena a todos los invitados que se vayan, lo que hacen todos al tiempo que reniegan de ella. Butterfly y Pinkerton se casan de todas formas y tienen su apasionada primera noche de amor (dúo Vogliatemi bene).
Acto 2
Tres años después, Butterfly está a la espera del regreso de Pinkerton, quien partió a Estados Unidos poco después de la boda. Su criada Suzuki intenta convencerla de que él no volverá, pero ella no la escucha. En un apasionado intento por convencerla de lo contrario, Butterfly canta su gran aria (Un bel dí vedremo). Goro (el casamentero que arregló el matrimonio) sigue intentando casarla de nuevo, pero Butterfly no lo escucha tampoco, pese a la pobreza extrema que atraviesa. Sharpless, el cónsul estadounidense, llega a la casa con una carta que le ha enviado Pinkerton, en la que le pide que le explique a Butterfly que él volverá a Japón, pero no con la intención de estar con ella. Él comienza a leer la carta pero no puede decidirse a acabarla pues Butterfly se altera muchísimo al oír que Pinkerton regresa. Con el fin de prepararla para la verdad, Sharpless le pregunta qué haría con su vida si Pinkerton decidiese no volver jamás. Con seriedad impetuosa, Butterfly responde que solo podría volver a divertir a la gente con sus canciones, o bien, morir.
Cuando Sharpless trata de convencerla de que se case con el rico Yamadori, un príncipe que la pretende, Butterfly le revela que tuvo un hijo con Pinkerton, producto de su noche de bodas, y argumenta que el marino podrá olvidarla a ella pero no a su hijo. Dado que Pinkerton ignora por completo los hechos, el alarmado cónsul promete informar a Pinkerton del asunto y a la vez trata de persuadir a la joven a casarse con Yamadori. Ella le ordena retirarse, pero el diplomático permanece en la casa y ve cómo Butterfly, desolada, toma al niño en sus brazos y canta su dolorosa aria "Che tua madre dovrá", en la que explica que sin dinero y sin un marido que la proteja ella tendrá que pedir dinero en las calles o cantar; que hará todo menos "ese oficio deshonrado" (que puede interpretarse como prostitución). En su delirio y desesperación, la joven dice preferir acabar con su vida. Conmovido, Sharpless pregunta con dulzura al niño su nombre; Butterfly responde por él: su nombre es "Dolore" (dolor). Sharpless se retira y la joven corre a observar con un catalejo por la ventana hacia el océano. Al divisar la bandera de la nave estadounidense "Abraham Lincoln" (el barco que dirige Pinkerton), siente triunfar su amor por verlo volver y le pide a Suzuki que llenen el espacio con flores de todo tipo, para que la llegada de Pinkerton sea en primavera como él había prometido. Aquí comienzan los pasajes más tristes de la ópera.
Expectantes, Suzuki, Dolore y Butterfly esperan toda la noche la llegada del barco. Al amanecer, Butterfly cae rendida y duerme.
Acto 3
Suzuki se despierta por la mañana; Butterfly duerme. Llegan Sharpless y Pinkerton, junto con Kate, la nueva esposa estadounidense del marino. Han venido porque, al enterarse de la existencia del hijo deciden recogerlo para criarlo en Estados Unidos. Cuando Pinkerton ve cómo Butterfly ha decorado la casa para su regreso, se da cuenta de que él ha cometido un gran error. Admite que es un cobarde y no puede enfrentarse a ella, de manera que Suzuki, Sharpless y Kate le dan la noticia. Butterfly se muestra conforme con entregar al niño si Pinkerton viene él mismo a verla. Mientras tanto, Butterfly pide perdón ante una estatua de Buda, se despide de su hijo y le tapa los ojos (Tu tu piccolo iddio). Luego se retira a sus habitaciones y se clava el cuchillo de su padre. Tambaleante, besa a su hijo y muere. Pinkerton se apresura a entrar, pero es demasiado tarde.
Arias célebres
Los pasajes más célebres de la ópera son:
el dúo Pinkerton/Sharpless «Dovunque al mondo» - Acto I
el conjunto «Ecco ! Son giunte» (Goro y los amigos de Butterfly) - Acto I
el dúo Butterfly/Pinkerton «Viene la sera» - Acto I
1932: Madame Butterfly, adaptación no cantada, dirigida por Marion Gering, con Cary Grant y Sylvia Sidney, basada sobre la obra de Belasco y el libreto de la ópera de Puccini. La música de Puccini podía ser interpretada por una orquesta durante la proyección de la película.[18]
1988 : M. Butterfly, obra de David Henry Hwang, relata la relación amorosa de un diplomático francés y de una cantante de ópera china, que revelará ser un hombre. Esta pieza ha sido adaptada al cine en 1993 por David Cronenberg.
El grupo de rockWeezer se ha inspirado en Madame Butterfly para su segundo disco Pinkerton, que contiene referencias a la obra de Puccini y a sus personajes, particularmente sobre el último corte del álbum, Butterfly. Un mapa del mundo ficticio incluido en la portada del disco contiene igualmente referencias a Sharpless y Cio-Cio-San. Además, un extracto de la ópera, en italiano está inscrito en torno al propio disco compacto.
Notas
↑Cio-Cio es una transcripción italiana para chōchō (蝶々), «mariposa» en japonés. San es un honorífico japonés, que aquí se podría traducir como «señora».
↑El creador del rol, Emilio Venturini, era un tenor. La partitura estadounidense de Ricordi de dos actos para 1905, accesible abajo en la Universidad de Indiana, señala que es papel de barítono pero la música está en clave de sol. Tiene tal tesitura y voz que este papel del príncipe Yamadori lo han interpretado a veces barítonos.