El ejército británico capturó a todos los miembros del levantamiento, excepto a los dos líderes de la red, lo que llevó a la pena capital para algunos de ellos.[1][2]
Secuelas
El levantamiento dejó varias implicaciones para los irlandeses y para el gobierno británico de Terranova.[1][2] Era la primera vez que se producía un levantamiento de este tipo en Terranova y los británicos temían que no fuera la última.[1][2] Los funcionarios británicos en la Oficina Colonial consideraban que Terranova tenía una reputación como un «Tipperary transatlántico», una colonia distante pero semi-irlandesa con el potencial de turbulencia política.[1][2]