Las sedes de los diversos servicios de dicha mancomunidad se encuentran en la plaza de la Constitución, s/n de Casas-Ibáñez, en la c/ Matadero, 5 de Fuentealbilla y en la c/ de los Barrancos, 24 de Alatoz.
Municipios
En 2017 la población ascendía a 28.079 habitantes según las cifras oficiales del INE.
La surcan el río Júcar, y sus afluentes los ríos Cabriel y Valdemembra. Los ríos Júcar y Cabriel dejan entre sus hermosos valles una llanura típicamente manchega.
Economía
Como en la Manchuela conquense, tiene especial importancia en la zona el cultivo de champiñón, cereal, vid, olivo, azafrán, así como la ganadería ovina. Precisamente, la totalidad de la Manchuela albaceteña se encuentra integrada dentro de la Denominación de Origen Manchuela de vino.
Turismo
Se abre paso en la comarca el turismo, que cuenta como destinos principales las localidades de Alcalá del Júcar, Jorquera y Villatoya, entre otras.
Historia
Históricamente, la comarca de La Manchuela albaceteña (a excepción de la localidad de Madrigueras) formó parte de la Comunidad de Villa y Tierra de Jorquera, que como el resto de La Manchuela pasó a formar parte del Marquesado de Villena. Madrigueras, en la Manchuela occidental albaceteña, formaba parte de la Comunidad de Villa y Tierra de Alarcón, mientras que la localidad de El Herrumblar (que pese a pertenecer a la provincia de Cuenca forma parte de la Mancomunidad de la Manchuela albaceteña) pertenecía a la Comunidad de Villa y Tierra de Iniesta Estas tres comunidades (Alarcón, Jorquera e Iniesta) recibieron el Fuero de Cuenca, que se utilizó en su repoblación. Durante el reinado de los Reyes Católicos, se segregó de este la Tierra de Ves, que pasó a ser de realengo. Con la división provincial del Conde de Floridablanca, el Estado de Jorquera quedó integrado en la provincia de Cuenca y la Tierra de Ves en el Reino de Murcia. Con la creación de la provincia de Albacete en 1833, los municipios de la Manchuela albaceteña pasaron a formar parte de dicha provincia, integrándose mayoritariamente en el partido judicial de Casas Ibáñez y en su distrito electoral durante la Restauración.
Según el historiador Almendros Toledo, el topónimo "Manchuela" no apareció hasta mediados de los años 60 del siglo XX como denominación geográfica para obtener una denominación de origen de vino, apareciendo en 1966 como un territorio diferenciado en la división oficial de denominaciones de origen de vinos de España.[2] La Denominación de Origen Manchuela finalmente se constituyó en 2000.
Con la división comarcal a consecuencia del programa LEADER-PRODER para la obtención y reparto de fondos europeos, la Manchuela albaceteña se unió en la mancomunidad "Manchuela", a la que se añadió el municipio conquense de El Herrumblar. Paralelamente los municipios manchegos de Cuenca hicieron lo propio, formando la Asociación para el Desarrollo Integral de la Manchuela Conquense.