Durante su cénit profesional, llegó a ser considerada una de las más destacadas figuras de la zarzuela española. Fue retratada en 1904 por Joaquín Sorolla, dicha obra se encuentra en la actualidad en el Museo de Bellas Artes de Valencia. Eduardo Zamacois escribió una novela de memorias sobre ella en 1905. Se retiró de los escenarios a la edad de treinta y tres años. Falleció a los cincuenta y seis años, el 1 de marzo de 1931, en Madrid.