Ifriquía es una arabización del nombre latino África, con el que se designaba en el Imperio romano a esa misma zona, y que tiene una etimología discutida. En lengua árabe actual, Ifriquía designa a todo el continente africano.
A partir de 750, la dinastía de los abasíes sucede a la de los omeyas, y en el 800, surge la dinastía de los Aglabíes, que establece en Ifriquía un emirato, nominalmente dependiente del califato abbasí, a partir del nombramiento del árabeIbrahim I ibn Aglab al-Tamimi como gobernador o valí de Cairuán. Son sustituidos a finales del siglo IX por grupos ismailíes, una rama heterodoxa del islamchií que se hace fuerte en la zona y que proclamará en ella el Califato fatimí. Los fatimíes se extienden posteriormente hacia Egipto, que se convertirá en el centro del califato debido a que desde mediados del siglo X, las revueltas bereberes hostigan sin cesar al poder fatimí en Ifriquía. Los fatimíes confían el gobierno de Ifriquía a una dinastía bereber, la de los Ziríes, que en 1046 rompen con los fatimíes y reconocen como soberano al califaabasí de Bagdad. Los fatimíes reaccionan empujando a las tribus beduinas de los hilalíes a atacar y conquistar la región. Ifriquía se somete de este modo nuevamente al poder fatimí, hasta su caída en 1171. A partir de 1230, la zona está bajo control de la dinastía háfsida y en 1574 es conquistada por los otomanos.