Debe su extraño nombre a que, al parecer, hubo en este hospital una imagen conocida como la Virgen de la Inclusa (siendo «inclusa» fruto de la pronunciación española de Enkhuizen, Enckussen,[2] o Enckuissen,[3]) localidad flamenca de la que había sido traída por soldados de Felipe II.[a][4]
Otras fuentes proponen que la etimología del término inclusa proviene del nombre de una imagen de la virgen conocida como Nuestra Señora de la Inclusa, que presidía la casa de expósitos de Madrid, y que se trajo en el siglo xvi de la isla holandesa de Sluys o «L'Écluse»,[5] ("la esclusa").
Dedicación
Este hospital recogía no sólo a los niños abandonados en las calles, sino también a los recién nacidos en los hospitales de la Pasión y los Desamparados, así como los depositados en la propia “casa refugio” o primitiva “casa de socorro”.
La recogida de niños huérfanos era tarea de la parroquia de San Ginés, que luego los trasladaba a una «casa en la que se gestionaba cómo bautizarlos», así como el enterramiento de los fallecidos y las misas de difuntos correspondientes.
↑Pedro Felipe Monlau, en 1850, daba una explicación similar: «Esta casa [refiriéndose a la Inclusa de la calle de Mesón de Paredes] tiene capilla pública, en la cual se venera una imagen de Ntra. Sra., que trajo de Enkuissen un soldado español. De ahí, por corrupción del nombre de aquella ciudad de Holanda, el de Inculsa que se ha aplicado al establecimiento.»
Referencias
↑A. Velasco Zazo, (1954). «Recintos Sagrados de Madrid», Madrid.
Peñasco de la Puente, Hilario; Cambronero, Carlos (1990). (facsímil de 1889), ed. Las calles de Madrid. Noticias, tradiciones y curiosidades. Madrid: Fernando Plaza del Amo, S.L. ISBN978-84-87653-02-5.
Répide, Pedro (2011). María Isabel Gea, ed. Las calles de Madrid. Madrid: Ediciones La Librería. p. 417. ISBN9788487290909.