Esteban de Lyon (s. V - Lyon, 13 de febrero de 512), fue un obispo francés, venerado como santo por la Iglesia Católica, y cuya memoria se recuerda el 13 de febrero.
Hagiografía
Se sabe muy poco de Esteban. Algunas de las fuentes sobre su vida son el Martirologio Hieronimiano y otros afamados compendios, como The Book of Saints o "Libro de los santos", de los monjes de Ramsgate.[1] El martirologio romano solo nos dice lo siguiente sobre élː
"En Lyon, en la Galia, san Esteban, obispo. c. 512."[2][3]
En todo caso se le describe como un mártir, o a veces como confesor, lo que en palabras de los estudiososː "...significa que sufrió por la fe sin llegar al martirio."[3] La teoría de su martirio se desvanece con la afirmación de que murió por causas naturales.[1] Se le atribuye la conversión de los burgundios arios al cristianismo ortodoxo.[1] Tal vez, por ese motivo se afirme lo de que sufrió por su fe sin llegar a morir por ella.
Fue el 23° obispo de Lyon, sucediendo a Rústico, quién por comisión del rey ostrogodo Teodorico, debió apartarse de su cargo para emprender el encargo del rey.[2]
Fue amigo personal de Enodio de Pavía, quien le describía como una persona con grandes dotes y a quien le encomendaba que orara por él.[3] También lo menciona Avito de Vienne, en sus cartas, donde describe su celo religioso y otras virtudes especiales que a su juicio, lo hacía un hombre digno de admiración.[2] Es por estos testimonios que se sabe que verdaderamente existió.
Falleció el 13 de febrero de 512, y sus restos reposan en la Iglesia de San Justo de Lyon. A su muerte, probablemente un hermano suyo, Vivenciolo, asumió la sede de Lyon.[nota 1]
Referencias
Notas
- ↑ Duchesne, en Fastes Episcopaux, II, pág. 164, lo menciona al pasar, pero en el apartado de Vivenciolo menciona la hipótesis de que fuera hermano de san Esteban.