Una erupción efusiva es una erupción volcánica caracterizada porqué la lava mana hacia el suelo (en oposición a la fragmentación violenta del
magma por las erupciones explosivas.[1] Las coladas de lava generadas por las erupciones efusivas varían en forma, grosor, longitud y amplitud dependiendo del tipo de lava expulsada, de la pendiente de la superficie y de la duración de la erupción.[2]
Por ejemplo, la lava de andesita típicamente forma coladas volcánicas en bloque,[3] y las coladas volcánicas de dacita debido a su viscosidad a menudo forman domo de lava.[4]
Referencias
↑«Eruption Styles». volcano.oregonstate.edu(en inglés). Consultado el 25 de abril de 2018.