La epilepsia frontal nocturna (EFN) es un tipo de epilepsia de origen focal que solo ocurre durante el sueño profundo que se manifiesta de diferentes formas: gritos, movimientos de los pies, salir de la cama rápidamente etc. Este tipo de crisis son cortas (suelen ser unos segundos aunque se ha reportado casos que llega a ser menos de dos minutos)[1]y que el paciente no llega a recordar o tiene un recuerdo leve. Además, se suelen repetir varias veces durante la etapa del sueño profundo, desde una crisis hasta 20 crisis por noche.
La enfermedad es reconocida como enfermedad rara o poco frecuente[2] con una prevalencia estimada de 1,8/100.000 individuos, y representa alrededor del 10% de los casos quirúrgicos resistentes a los medicamentos.
Causas
Las causa de este tipo de epilepsia son las mismas que otro tipo de epilepsia. Aun así se comentan cada una de ellas
Idiopática: La causa es desconocida. Es la forma más común.
Criptogénica: En este caso tampoco se sabe la causa pero se descarta la posibilidad de que sea causado de manera genética.
Genética: La enfermedad es causada porque se transmite un gen que provoca al hijo la enfermedad.
Tumor: suele ser la consecuencia de la epilepsia. Para descartarlo normalmente se realiza un resonancia magnética.
Traumatismo: se debe a una lesión provocada por un golpe fuerte golpe que además el paciente se queda inconsciente durante un tiempo.
Diagnóstico diferencial
El diagnóstico de EFN se realiza mediante una polisomnografía de sueño nocturno o análisis genético si en la familia hay más personas con este tipo de epilepsia[3].
Por otro lado, el diagnóstico de la enfermedad suele ser tardía ya que se suele identificar con parasomnias (como terror nocturno, sonambulismo, trastorno del sueño REM etc.). En las parasomnias las personas suelen interactuar con el ambiente, coger objetos y la crisis dura más tiempo que las personas con epilepsia frontal nocturna.
Las crisis de pacientes con EFN son de corta duración y se realiza un movimiento rápido tipo sacudida. Además, la persona no interactúa con el medio como por ejemplo vestirse o coger algún objeto o hablar. Por último, si el paciente antes de la crisis ve un aura es señal de que es una crisis epiléptica.[1]Si el paciente tiene varios episodios durante la noche también es un indicador de que se trata de EFN y no un tipo de parasomnia.[4]
Según los estudios científicos hay dos formas de diferencias EFN de las parasomnias. Estas son:
Estable, incremento de la frecuencia[6], rara remisión
Episodios por mes
Generalmente esporádico
Esporádico
Casi todas las noches
Casi todas las noches
Ocurrencia durante la noche
Generalmente en el primer tercio
Último tercio
Al menos 90 minutos después del inicio del sueño
En cualquier momento
Inicio de los episodios en la etapa del sueño
Sueño No REM (N3)
Sueño REM
Sueño REM
No REM (Principalmente N2)
Factores desencadenantes
privación de sueño, enfermedad febril
Estrés, eventos traumáticos
Episodios/noche
Generalmente uno
Generalmente 1
De 1 a varios 1-2
Varios
Duración del episodio
1 - 10
3 - 30 minutos
Minutos
Segundos a 3 minutos
Conciencia si se despierta
Generalmente deteriorado
Normal
Normal
Normal
Recuerdo del episodio del despertar
No
Sí
Sí
No constante
Seizure European journal of Epilepsy diferencia los diferentes episodios de la siguiente forma [7]
No REM (parasomnias) Trastornos de la excitación.
Tiende a desaparecer a lo largo de la vida
Factores desencadenantes
Primer tercio de la noche
REM (parasomnias). Dos tipos:
RBD
A menudo en neurodege.trastornos
Generalmente aparición tardía
Sin antecedentes familiares
Memoria de la mentalidad de los sueños
Pesadillas
Tiende a desaparecer a lo largo de la vida.
Último tercio de la noche
Activación autonómico leve
Memoria de la mentalidad de los sueños
EFN:
Cualquier edad
En cualquier momento durante la noche
Varios por la noche
Breve duración (segundos)
Patrón motor estereotipado
Tratamiento
La enfermedad, al igual que los otros tipos de epilepsia, es crónico y un estudio realizado en 2014 indica que no se reporta mejoría en pacientes con EFN.[8] Sin embargo se ha visto que 4 medicamentos son los mejores para esta enfermedad que son: carbamazepina[9] topiramato[10], lacosamida, acetazolamida, y perampanel[11]. La carbamazepina (CBZ) se ha considerado tradicionalmente como la opción de tratamiento de primera línea en los pacientes con EFN.
Por otro lado, la cirugía, al igual que en otros tipos de epilepsia, se puede considerar para eliminar la enfermedad.
Tratamiento no farmacológico
No hay ningún estudio, fármaco ni acción para mejorar a los pacientes con EFN. Pero al ser el EFN un tipo de epilepsia los estudios podrían llegar a ayudar a los pacientes. Por otro lado, hay que tener en cuenta que los estudios investigados son pocos y realizado a pocos pacientes, por lo que no va a llegar a quitar la enfermedad en sí. De todas formas, se hace una recopilación de lo que mencionan los diferentes estudios:
Romero: la planta de romero parece ser tener propiedades antiepilépticas.[12] Sin embargo, un estudio analiza que el aceite esencial de romero puede provocar crisis.[13] Hay un tercer estudio que menciona que el aceite esencia de romero «aumento de la latencia de las convulsiones, disminución de la intensidad y diferencias en la calidad de las convulsiones, características, desde simples espasmos hasta convulsiones completas».[14]Este último caso parece que el romero sí puede ser algo útil para tratar la epilepsia. Pero como se concluye y como lo dicen los autores se necesitan más estudios para sacar conclusiones.
Aceites esenciales. Un estudio titulado "The Effects of Various Essential Oils on Epilepsy and Acute Seizure: A Systematic Review»[15](2019) utiliza diferentes aceites esencial para tratar la epilepsia, aunque ninguno de ellos son de fácil acceso.
Dieta cetogénica[16][17]: es un tipo de dieta baja en carbohidratos y alta en grasas. Se ha visto que este tipo de dieta reduce las crisis epilépticas. Por otro lado, no suele ser recomendado además que también tiene efectos secundarios.
Un estudio del 2021 menciona que los pacientes que consumen muchas calorías y poca verdura sufren de más crisis.[18]
Efecto Mozart: Estudios asocian que la obra Sonata para dos pianos de Mozart (K. 448) puede reducir los signos epileptiformes[19].
Nomenclatura científica
En español la información para entender la enfermedad es escasa. Para conocer la enfermedad es mejor revisar estudios científicos en inglés en páginas como Pubmed, Taylor & Francis Online.[20]
La nomenclatura a la cual se llamaba a la enfermedad ha ido cambiando con el paso de los años. Los cambios fueron los siguientes:
ADNFLE[23] (Autosomic Dominat Nocturnal Frontal Lobe) o ADSHE[24] (Autosomic Dominant Sleep-related Hypermotor Epilepsy) . Es la misma enfermedad solo que se sabe que es de origen genético. (Autosómico dominante). Para conocer que es ADNFLE es necesario realizar una prueba genética y también saber que es un familia hay casos de epilepsia.
Por último, existe un tipo de epilepsia frontal en la que los signos epileptiformes no solo ocurren durante el sueño llama Frontal lobe epilepsy (FLE).
Daño estructural en pacientes con EFN
Un estudio realizado en 2023 a 60 persona reportó la disminución de materia gris en el cerebro[25]. Por otro lado, los mismos autores tiene un estudio que menciona que jugar a fútbol aumenta la materia gris [6]. Pero más allá de lo que se produce a nivel celular no se ve cambios importantes hacia la persona tales como trastornos de personalidad u otras enfermedades relacionadas con EFN.
Otros estudios
Los pacientes con epilepsia frontal (no se comenta que fuese EFN) tienen una mayor vulnerabilidad a desarrollar conductas problemáticas con el juego tipo ludopatías[26].