Choi era un extremo muy reconocido por su gran velocidad. Durante su niñez fue identificado como una de las promesas del fútbol surcoreano, de manera tal que fue adquirido por el F.C. Seoul, por entonces conocido como Anyang LG Cheetahs, en el mercado de pases del 2000, tras su graduación de la Escuela Secundaria Bupyeong (donde también asistió Lee Chun-soo, exfutbolista del Feyenoord). A pesar de su promesa inicial, su carrera profesional en el F.C. Seoul fue particularmente exitosa, jugando como lateral junto con su entonces compañero de equipo Lee Young-pyo. Después de breves períodos jugando para Incheon United y Shimizu S-Pulse de la J1 League, se unió a Pohang Steelers. Aunque era uno de los jugadores mejor pagados en Pohang, Choi no tuvo muchas oportunidades con el entrenador brasileño Sérgio Farias. Esto se debió en gran parte a que los Steelers se concentraban más en el juego por el centro del campo que en las bandas, con el creador de juego André Luiz Tavares tomando un papel preponderante. Dentro de este contexto, Choi solía ser suplente. Tras la conclusión de la temporada 2007, se transfirió a Jeonbuk en un acuerdo de intercambio con Kwon Jip y Kim Jung-kyum. (El central Kim Sung-keun también fue parte del intercambio junto con Choi).
A nivel internacional, Choi formó parte del equipo olímpico de fútbol de Corea del Sur en 2000 y en 2004. En los Juegos Olímpicos de Sídney no tuvo minutos en la eliminación en fase de grupos de su combinado, pero en 2004 los surcoreanos terminarían segundos en el Grupo A y clasificarían a la siguiente ronda. En dicha instancia fueron derrotados por Paraguay, eventual ganador de la medalla de plata. También fue miembro del equipo de Corea del Sur en la Copa Mundial de Fútbol de 2002, pero pasó la mayor parte del torneo en el banco; tan sólo tuvo acción en el partido por el tercer puesto ante Turquía.