Los cuerpos masivos de Centrosaurus fueron soportados por extremidades robustas, media unos 6 metros de largo, presentaban un solo cuerno sobre la nariz como otro centrosaurinos,[2] el cual podía curvarse hacia adelante o hacia atrás, dependiendo del individuo y la ornamentación del volante disminuye al aumentar la edad.[3]
Un par de pequeños cuernos también se encuentra sobre los ojos, en Centrosaurus apertus éstos se dirigen hacia arriba, mientras que se dirigen a los lados en Coronosaurus. El volante de Centrosaurus era moderadamente largo, con ventanas bastante grandes y pequeños cuernos a lo largo del borde externo.[2] C. apertus se distingue por tener dos cuernos grandes como ganchos sobre el extremo del volante, mientras que en Coronosaurus estos cuernos son pequeños y cubiertos con crecimientos pequeños, como dedos.
Al igual que otros ceratópsidos, las mandíbulas de los centrosaurios estaban adaptadas para cortar material vegetal resistente. La gola proveía espacio para la inserción de los músculos mandibulares.[2]
Descubrimiento e investigación
El primer fósilCentrosaurus fue descubierto por Lawrence Lambe en la provincia canadiense de Alberta, a lo largo del Río Red Deer, donde existen yacimientos masivos de estos animales.[2] Posteriormente, vastas cama de huesos de Centrosaurus fueron encontradas en Parque Provincial de los Dinosaurios, también en Alberta.[2] Se cree que estos yacimientos se extienden por kilómetros, contienendo miles de especímenes de todas las edades y constitución física.[2]
Los científicos han especulado que la alta densidad y el número de individuos serían explicados si habían muerto mientras que intentaban cruzar un río durante una crecida.[2] Se ha realizado un descubrimiento de miles de fósiles de Centrosaurus cerca de la ciudad de Hilda, Alberta, que se cree que es el lecho más grande de huesos de dinosaurios jamás descubierto. El área ahora se conoce como La Mega cama de Huesos de Hilda.[4]
La especie C. brinkmani, que se describió en 2005,[5] se trasladó al nuevo género Coronosaurus en 2012.[6]
Etimología
El nombre proviene de griegoκεντρον, kentron, "punta" con σαυρος, sauros, "lagarto". El nombre refiere a la serie de pequeños cuernos colocados a lo largo del margen del volante, y no al cuerno en su nariz, que era desconocido cuando el dinosaurio fue nombrado. No debe ser confundido con el estegosáuridoKentrosaurus , cuyo nombre se deriva de la misma palabra griega.
Clasificación
Centrosaurus le da el nombre a la subfamilia Centrosaurinae a la que pertenece. Tiene como relativo cercanos a Styracosaurus y Monoclonius. Se asemeja tanto a estos últimos que algunos paleontólogos han considerado que son el mismo animal.[2] La investigación posterior demostró, sin embargo, que eran de hecho géneros separados. Las diferencias críticas son encontradas en la configuración de los cuernos en el borde del volante.[2] Otros miembros del cladoCentrosaurinae incluyen Pachyrhinosaurus,[7][8] Avaceratops,[7] Einiosaurus,[8][9] Albertaceratops,[9] Achelousaurus,[8] y posiblemente Brachyceratops,[10] aunque Brachyceratops es dudoso. Debido a la variación entre especies e incluso entre especímenes individuales de centrosaurinidos, ha habido mucho debate sobre qué géneros y especies son válidos, particularmente si Centrosaurus y Monoclonius son géneros válidos, o no diagnosticables o posiblemente miembros de sexo opuesto. En 1996, Peter Dodson encontró suficiente variación entre Centrosaurus, Styracosaurus y Monoclonius para garantizar géneros separados, y que Styracosaurus se parecía más a Centrosaurus de lo que se parecía a Monoclonius.[11]
Dodson creía que una especie de Monoclonius, M. nasicornis, en realidad podría haber sido una Styracosaurus hembra.[11] Sus evaluaciones han sido seguidas parcialmente, y otros investigadores no han aceptado a Monoclonius nasicornis como un Styracosaurus hembra ,[12] ni a Monoclonius como un género válido.[11] Mientras que el dimorfismo sexual se ha propuesto para un ceratopsiano más basal, Protoceratops,[13] no hay evidencia firme de dimorfismo sexual en ningún ceratópsido.[14][15][16] Otros autores has sugerido que M. nasicornus es sinónimo de C. apertus,[17] o lo considera una especie de Centrosaurus separada, Centrosaurus nasicornus.[18] También se ha sugerido como el ancestro directo de Styracosaurus albertensis.[19] Un estudio de 2014 de los cambios durante el crecimiento en Centrosaurus concluyó que C. nasicornus es un sinónimo más moderno de C. apertus , que representa una etapa de crecimiento medio.[3]
C. cutleri (N.D.) (Brown, 1917 (originalmente Monoclonius))=C. apertus
C. dawsoni (N.D.) (Lambe, 1902 (originalmente Monoclonius))=C. apertus
C. flexus (Brown, 1914 (originalmente Monoclonius))=C. apertus
C. longirostris (Sternberg, 1940)=C. apertus
C. nasicornus (Brown, 1917 (originalmente Monoclonius))=C. apertus
C. recurvicornis (N.D.) (Cope, 1889 (originalmente Monoclonius))="Monoclonius recurvicornis" (no es un Centrosaurinae, es un Ceratopsinae)
Paleobiología
Al igual que otros ceratópsidos, las mandíbulas de Centrosaurus se adaptaron para esquilar a través de material vegetal resistente. El descubrimiento grandes lechos de huesos de Centrosaurus en Canadá sugiere que eran animales gregarios y que podrían haber viajado en grandes manadas.[2] Se conoce un lecho óseo compuesto por Centrosaurus y restos de Styracosaurus de la Formación Dinosaur Park en lo que hoy es Alberta.[21] Las muertes masivas pueden haber sido causadas por animales que sin ser una manada acaban reuniéndose alrededor de un pozo de agua durante una sequía.[22] Centrosaurus se encuentra más abajo en la formación que Styracosaurus, lo que indica que Centrosaurus fue desplazado por Styracosaurus ya que el entorno cambió con el tiempo.[12]
Los grandes volantes y los cuernos nasales de los ceratópsidos se encuentran entre los adornos faciales más distintivos de todos los dinosaurios. Su función ha sido objeto de debate desde que se descubrieron los primeros dinosaurios con cuernos. Las teorías comunes sobre la función de los adornos y cuernos ceratopsianos incluyen la defensa de los depredadores, el combate dentro de la especie y la exhibición visual. Un estudio de 2009 de las lesiones del cráneo de Triceratops y Centrosaurus encontró que las lesiones óseas en los cráneos eran más probablemente causadas por el combate intraespecífico, combate de cuerno a cuerno, en lugar de los ataques predatorios. Los collares de Centrosaurus eran demasiado delgados para ser utilizados como defensa contra los depredadores, aunque los adornos más gruesos y sólidos de Triceratops podría haber evolucionado para proteger sus cuellos. Los collares de Centrosaurus probablemente se utilizaron "para el reconocimiento de especies u otras formas de visualización".[23]
Paleoecología
Thomas M. Lehman ha observado que los fósiles de Centrosaurus no se han encontrado fuera del sur de Alberta a pesar de que se encuentran entre los dinosaurios del Juditiano más abundantes de la región. Los grandes herbívoros como los ceratópsidos que vivían en Norteamérica durante el Cretácico superior tenían "rangos geográficos notablemente pequeños" a pesar de su gran tamaño corporal y alta movilidad. Esta distribución restringida contrasta fuertemente con las faunas modernas de mamíferos herbívoros cuyos grandes rangos "típicamente abarcan gran parte de un continente".[24]
↑Arbour, V. M.; Burns, M. E.; Sissons, R. L. (2009). «A redescription of the ankylosaurid dinosaur Dyoplosaurus acutosquameus Parks, 1924 (Ornithischia: Ankylosauria) and a revision of the genus». Journal of Vertebrate Paleontology29 (4): 1117-1135. doi:10.1671/039.029.0405.
↑ abcdefghij"Centrosaurus." In: Dodson, Peter & Britt, Brooks & Carpenter, Kenneth & Forster, Catherine A. & Gillette, David D. & Norell, Mark A. & Olshevsky, George & Parrish, J. Michael & Weishampel, David B. The Age of Dinosaurs. Publications International, LTD. p. 135. ISBN 0-7853-0443-6.
↑Ryan, M.J., and Russell, A.P. 2005. A new centrosaurine ceratopsid from the Oldman Formation of Alberta and its implications for centrosaurine taxonomy and systematics. Canadian Journal of Earth Sciences, 42(7): 1369–1387. doi:10.1139/e05-029
↑ abMichael J. Ryan, David C. Evans and Kieran M. Shepherd (2012). «A new ceratopsid from the Foremost Formation (middle Campanian) of Alberta». Canadian Journal of Earth Sciences49 (10): 1251-1262. doi:10.1139/e2012-056.
↑ abcRyan, M.J.; A.P. Russell (2005). «A new centrosaurine ceratopsid from the Oldman Formation of Alberta and its implications for centrosaurine taxonomy and systematics». Canadian Journal of Earth Sciences42 (7): 1369-1387. doi:10.1139/e05-029.
↑ abRyan, M.J. (2007). «A new basal centrosaurine ceratopsid from the Oldman Formation, southeastern Alberta». Journal of Paleontology81 (2): 376-396. doi:10.1666/0022-3360(2007)81[376:ANBCCF]2.0.CO;2.
↑Dodson, P., Forster, C. A, and Sampson, S. D. (2004) Ceratopsidae. In: Weishampel, D. B., Dodson, P., and Osmólska, H. (eds.), The Dinosauria (second edition). University of California Press:Berkeley, pp. 494–513. ISBN0-520-24209-2.
↑ abcDodson, P. (1996). The Horned Dinosaurs: A Natural History. Princeton University Press: Princeton, New Jersey, pp. 197–199. ISBN0-691-02882-6.
↑ abRyan, Michael J.; Evans, David C. (2005). «Ornithischian Dinosaurs». En Currie, Phillip J.; Koppelhus, Eva, eds. Dinosaur Provincial Park: A Spectacular Ancient Ecosystem Revealed. Bloomington: Indiana University Press. pp. 312–348. ISBN0-253-34595-2.
↑Dodson, P. «Quantitative aspects of relative growth and sexual dimorphism in Protoceratops». Journal of Paleontology50: 929-940.
↑Forster, C. A. (1990). The cranial morphology and systematics of Triceratops, with a preliminary analysis of ceratopsian phylogeny. Ph.D. Dissertation. University of Pennsylvania, Philadelphia. 227 pp.
↑Lehman, T. M. (1998). «A gigantic skull and skeleton of the horned dinosaur Pentaceratops sternbergi from New Mexico». Journal of Paleontology72 (5): 894-906.
↑Sampson, S. D.; Ryan, M.J.; Tanke, D.H. (1997). «Craniofacial ontogeny in centrosaurine dinosaurs (Ornithischia: Ceratopsidae): taphonomic and behavioral phylogenetic implications». Zoological Journal of the Linnean Society121 (3): 293-337. doi:10.1111/j.1096-3642.1997.tb00340.x.
↑M.J. Ryan and D.C. Evans, 2005, "Ornithischian dinosaurs". In: P.J. Currie and E.B. Koppelhus (eds.), Dinosaur Provincial Park: A Spectacular Ancient Ecosystem Revealed. Indiana University Press, Bloomington pp 312-348
↑Russell, L.S. (1930). «Upper Cretaceous dinosaur faunas of North America». Proceedings of the American Philosophical Society69 (4): 133-159.
↑Paul, G.S., 2010, The Princeton Field Guide to Dinosaurs, Princeton University Press p. 261
↑Rogers, R. R. (1990). «Taphonomy of three dinosaur bone beds in the Upper Cretaceous Two Medicine Formation, northwestern Montana: Evidence for drought-related mortality». PALAIOS (SEPM Society for Sedimentary Geology) 5 (5): 394-41. JSTOR3514834. doi:10.2307/3514834.
↑Lehman, T. M., 2001, Late Cretaceous dinosaur provinciality: In: Mesozoic Vertebrate Life, edited by Tanke, D. H., and Carpenter, K., Indiana University Press, pp. 310-328.
Tanke, D. H. & Farke, A. A. 2006. Bone resorption, bone lesions, and extracranial fenestrae in ceratopsid dinosaurs: a preliminary assessment. In: K. Carpenter (ed.), Horns and Beaks: Ceratopsian and Ornithopod Dinosaurs. Indiana University Press, Bloomington, 319-347.