Anejos a los buques y diques deponentes se construyen careneros especiales que consisten en una serie de espigones de pilotaje o de fábrica, normales a la orilla, equidistantes entre sí lo que tienen de anchura las pontonas del dique, y sobre cuyas soleras depone el buque que suspende, quedando así en condiciones de tomar otra nueva embarcación.