Las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales del Principado de Asturias (BRIPAS), son equipos dedicados a la investigación de la causa de los incendios forestales dependientes de la Consejería de Presidencia del Gobierno del Principado de Asturias y enmarcados funcionalmente en el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias S. E. P. A. en coordinación con la Dirección General de Justicia. Están compuestas por Guardas del Medio Natural dependientes orgánicamente de la Dirección General de Justicia y por Bomberos conductores del S.E.P.A.
Existen cuatro equipos distribuidos territorialmente en tres zonas: central-noroccidental, suroccidental y oriental. Cada uno de ellos está compuesto por tres personas: un bombero-conductor del SEPA y dos Guardas del Medio Natural Investigadores de causas de incendios forestales, estos últimos con la condición de agentes de la autoridad y policía judicial genérica.
Historia
Una instrucción del 15 de junio de 2001 de la Consejería de Función Pública y Asuntos Europeos, fijó servicios especiales de vigilancia y extinción de incendios forestales y determinó en su punto 11, la creación de 4 Brigadas de Investigación de Causas de Incendios Forestales.[2]
En desarrollo de lo previsto en el citado artículo, mediante Resolución de 2 de julio de 2002 de la extinta Consejería de Administraciones Públicas y Asuntos Europeos, se crearon cuatro Brigadas de Investigación de Causas de Incendios Forestales integrándose cada una de ellas por un miembro de la entidad pública Bomberos del Principado de Asturias, un miembro de la Guardería de Medio Ambiente y un miembro de la Guardería de Medio Rural.
Mediante Resolución conjunta de las extintas Consejerías de Economía y Administración Pública y de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores de 29 de octubre de 2004, se fijó el periodo de activación de las Brigadas de Investigación de Causas de Incendios Forestales estableciéndose en siete meses anuales distribuidos en dos periodos coincidentes con las épocas de riesgo de incendios forestales y fijándose la dependencia funcional de los miembros de las mismas respecto de la entidad pública “Bomberos del Principado de Asturias”; ampliándose dicho periodo de activación mediante Resolución de 14 de noviembre de 2005.
Por Acuerdo del Consejo de Gobierno de 1 de marzo de 2007 se aprobó la relación de puestos de trabajo del personal funcionario en las distintas Consejerías y entidades de la Administración del Principado de Asturias, acuerdo mediante el cual fueron creadas ocho plazas de Investigador/a de Causas de Incendios Forestales, dentro de la escala de Guardas del Medio Natural, y que se adscribieron a la actualmente denominada Dirección General de Interior y Seguridad Pública de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad.
En 2009, la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad del Principado de Asturias reorganiza las Brigadas de Investigación de Causas de Incendios Forestales.[3] Los cambios más importantes se centran en reducir las zonas de actuación de cuatro a tres, creando una única zona Central-Noroccidental donde actúan dos brigadas con sede en La Morgal (Llanera).
Resultados de las investigaciones
Causas de los incendios investigados por las BRIPAS en el Principado de Asturias en el período 2002-2012Ganado pastando hierba nacida tras un incendioMotivaciones de los incendios intencionados en Asturias en el período 2002-2012 (Bripas)
En 2013 el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias publica una memoria en la que se recoge el resultado de 10 años de investigación de incendios en Asturias.[4]
En ese período, se investigaron un total 1294[5] incendios en los que ardieron 40.067 ha, lo que supone un 37,41% de la superficie quemada en Asturias en esos años. Como datos más significativos de este estudio, el cual llega a analizar las causas a nivel de municipio, se obtiene que más del 82 % de los incendios se originaron por causas intencionadas, representando las negligencias y causas accidentales casi un 13%.
En cuanto a las motivaciones encontradas en los intencionados, más del 70 % de ellos se deben a la regeneración de pastos para el ganado, una práctica muy extendida en el medio rural asturiano, ocasionándose estos sobre todo en primavera.
Durante la presentación de esta memoria, el Fiscal de Medio Ambiente, Alejandro Cabaleiro, elogió el trabajo desarrollado por estos equipos,[6] como también lo dejó patente en la Memoria Fiscal 2014 (ejercicio 2013) del Principado de Asturias, en el apartado 5.3.10, página 126.[7]
2014, año récord en sentencias
Durante el año 2014, gracias al trabajo en equipo de los Guardas del Medio Natural y los Bomberos del S.E.P.A. de las BRIPAS , se pudieron sentar en el banquillo a 14 personas por provocar incendios, con resultado de condena para todas ellas. Otras tres sentencias se consiguieron gracias a labores de vigilancia de otros Guardas del Medio Natural.[8] Se trata sin duda de cifras récord. Hay que tener en cuenta que antes de la creación de las BRIPAS, la media de condenas al año en Asturias por incendio forestal era de entre 1 y 3.
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