Pocos días antes del boinazo, el diario chileno La Nación publicó una noticia con el titular «Reabren caso cheques del hijo de Pinochet», en alusión al caso de los pinocheques, que ya había sido postergado en 1990 por una presión previa de Pinochet y el Ejército, en lo que se conoció como el «ejercicio de enlace», ocurrido el 19 de diciembre de ese año.[1][2]
El evento
Pinochet inició entonces nuevas presiones para cerrar el caso, esta vez más explícitas, reuniéndose en el Edificio de las Fuerzas Armadas, situado a unos 200 metros del Palacio de la Moneda, con oficiales del Ejército escoltados por soldados armados y vestidos con trajes de combate, por cuyas boinas negras al suceso se le conoció como «el boinazo».[1][3]