La iglesia de la Asunción está en el centro del pueblo. En las afueras, formando conjunto con el cementerio, se halla la ermita de San Blas.
Dentro del patrimonio etnológico encontramos el antiguo lavadero, hoy en desuso, pero en su día punto de encuentro para hacer la colada las mujeres del pueblo, y la nevera.
Conserva en su término cuatro peirones dedicados a la Virgen de la Soledad, San Antón, San Blas y del Gallo, que forma parte del Calvario, en el camino hacia Romanos.
La casa Consistorial alberga los usos de centro social (bar), consultorio médico y ayuntamiento. Se formaliza como un gran volumen que mira a la Iglesia de la Asunción, situada enfrente, en la Plaza. El vestíbulo de su interior se convierte en el espacio de representación que su uso público requiere.