En la liturgia cristiana a menudo se ha usado esta palabra, consagrándose incluso iglesias a la Anástasis, siendo la más famosa la de Constantinopla.
Su similitud con el nombre de Anastasia ha dado lugar a que se ponga en duda la veracidad de la existencia de Anastasia de Sirmio, que algunos pensaron que sería la personificación de la Resurrección de Cristo.
Arquitectura
En arquitectura, se denomina anástasis a la zona de una iglesia dedicada a la resurrección de Cristo o donde se representa dicha imagen. Se da sobre todo en las iglesias bizantinas, algunos de cuyos ejemplos más paradigmáticos son las iglesias de San Salvador de Cora, de Santa María de la Asunción de Torcello y, especialmente, del Santo Sepulcro de Jerusalén —conocida también como basílica de la Anástasis—, donde se considera zona de la anástasis todo el espacio que rodea la tumba de Cristo.[1]