La Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas[3], conocida por sus siglas como UTE, es la compañía estatal de producción , abastecimiento y distribución de energía eléctrica de Uruguay que opera en forma de monopolio. Cuenta con aproximadamente 1.500.000 clientes entre pequeños, medianos y grandes consumidores.
Creación
Creada el 21 de octubre de 1912, cuando se promulgó una ley que dio origen a esta empresa pública,[3] en el marco del impulso reformista y de modernización de los sucesivos gobiernos batllistas.
En su ley de creación se estableció la expropiación de la entonces Usina Eléctrica de Montevideo y de la Compañía de la Luz Eléctrica, ambas compañías privadas y con participación estatal hasta el momento de su expropiación.
A partir de 1931, en otro impulso de reformas batllistas, la telefonía que se encontraba hasta el momento en la órbita de la Administración General de Correos, Telégrafos y Teléfonos pasa a conformar la Administración de las Usinas Eléctricas del Estado por lo que su denominación se modifica a Administración General de las Usinas y Teléfonos del Estado.
Por resolución número 4.016 de 16 de abril de 1932 se toma la sigla UTE por denominación de Administración Nacional de Usinas y Teléfonos del Estado.
A partir de 1974, bajo la Dictadura Cívico-Militar, se decidió separar las funciones de producción y distribución de energía eléctrica de las telefónicas, separándolas en dos compañías especializadas, una para las telecomunicaciones Administración Nacional de Telecomunicaciones y otra para las usinas y trasmisiones eléctricas, y entonces, su nombre pasó a ser el actual.[3]
En cuanto a las instalaciones termoeléctricas, la empresa cuenta con la Central José Batlle y Ordóñez, la cual alberga cuatro grupos generadores accionados por turbinas de vapor (actualmente desafectados). También dispone de ocho motores de fueloil, cada uno con una capacidad de 10 MW. La Central Térmica de Respaldo de la Tablada aporta dos turbinas a gas, mientras que la Central de Punta del Tigre A cuenta con ocho turbinas a gas natural o gasoil. Por otro lado, la Central Punta del Tigre B opera como un ciclo combinado de 530 MW de potencia, equipado con dos turbinas de gas y una turbina de vapor, con la capacidad de utilizar tanto gas natural como gasoil como combustible.
Adicionalmente, UTE gestiona una central a gas de 20 MW ubicada en Maldonado, la cual utiliza el gas de descomposición de los vertederos (metano). Esta instalación es propiedad de la Intendencia del departamento.
Actividades
Por ley 16.832 se dispone que sólo las actividades de transmisión, transformación y distribución de energía eléctrica tienen carácter de servicio público en cuanto se destinen total o parcialmente a terceros en forma regular y permanente, de modo que las actividades de generación, importación, exportación y comercialización de energía eléctrica no constituyen servicio público.
Se agrega competencia a la prestación del servicio público, agregando el cometido de la realización de cualquiera de las actividades de la industria eléctrica. Art 3.º Ley 15.031, Art 23 Ley 16.832[4]
Por Decreto 276/002 las actividades de transmisión, transformación y distribución, considerados servicios públicos, pueden ser cumplidas por UTE o por concesión.
Según el Reglamento de Mercado Mayorista de Energía Eléctrica, en su artículo tercero, la generación, importación, exportación y comercialización, no son servicios públicos pero se rigen por disposiciones especiales.
Cambio en la matriz energética
En los últimos años, Uruguay experimentó un cambio radical en la matriz energética. Pasó de depender del petróleo y sus derivados a generar la mayor parte de su energía de fuentes renovables y sustentables.[5]