El Señor de los Anillos: el retorno del Rey arrasó en esta edición y logró varias hazañas que son consideradas como históricas para este galardón: empezando por ser la tercera película más premiada en la historia del Óscar al igualar las 11 estatuillas que ganarón con anterioridad Ben-Hur en 1959 y Titanic en 1998, además se convirtió en la tercera película en ganar todas las categorías en las que estaba nominada, superando las 9 estatuillas que ganaron Gigi en 1958 y El ultimo emperador en 1987, igualmente se convirtió en la segunda secuela en ganar el Óscar en la categoría principal, una hazaña que logró con anterioridad El Padrino II en 1974, además se convirtió en la décima película en ganar la estatuilla a Mejor película sin haber recibido una nominación en las categorías actorales y finalmente se convirtió en la primera película del género fantástico en ganar el Óscar a la Mejor película, destacando que anteriormente ninguna película de fantasía había ganado el premio.
Por su parte Sofia Coppola se convirtió en la tercera mujer en recibir una nominación al Óscar a la mejor dirección, además de ser la primera mujer estadounidense en recibir dicha nominación (cabe recordar que Lina Wertmüller es italiana y Jane Campion neozelandensa) y en virtud de las victorias previas conseguidas por su padre Francis Ford Coppola y su abuelo Carmine Coppola con la victoria de Sofia Coppola en la categoría de Mejor guion original, la convirtió en la segunda ganadora de la tercera generación de una familia en la historia del Óscar.
A los trece años de edad Keisha Castle-Hughes se convirtió en ese entonces en la actriz más joven en ser nominada al Óscar como Mejor actriz pero sería superada por Quvenzhane Wallis en 2012 al ser nominada en la misma categoría a los 9 años de edad.
Con las victorias de Sean Penn y Tim Robbins en las categorías de Mejor actor y Mejor actor actor de reparto respectivamente Mystic River se convirtió en la cuarta película en ganar las dos categorías de actuación masculina.
Blake Edwards, en reconocimiento de su En reconocimiento a su escritura, dirección y producción de una extraordinaria obra para la pantalla.[2]
In memoriam
Se realizaron dos recuerdos especiales a lo largo de la ceremonia. El primero fue presentado por Tom Hanks e iba dedicado al legendario cómico y múltiples veces presentador de la ceremonia, Bob Hope. El segundo fue presentado por Julia Roberts y se rindió homenaje a la mítica actriz y cuatro veces ganadora del Óscar, Katharine Hepburn.