Las llamas destruyen la Biblioteca de Alejandría, establecida en el Museion en el siglo IV a. C.. Entre los objetos perdidos en el incendio figuran obras científicas, como los pergaminos del astrónomo griego Aristarco de Samos, en los que afirmaba que la Tierra orbita alrededor del sol, y decenas de obras dramáticas de Eurípides y Sófocles.